Se inició la demolición de la obra que se construía en Riosucio para reemplazar el bloque antiguo, implosionado en el 2017.

Foto | Cortesía Secretaría de Educación de Caldas | LA PATRIA

Se inició la demolición de la obra que se construía en Riosucio para reemplazar el bloque antiguo, implosionado en el 2017.

LA PATRIA | MANIZALES

Otra historia de demolición avanza en Riosucio (Caldas), también en la Normal Sagrado Corazón. A la memoria vuelve el domingo 26 de febrero del 2017 cuando con una implosión, en seis segundos se vinieron a tierra 4 mil 300 metros cuadrados de construcción y cerca de 60 años de historia de un bloque de la institución.

El martes pasado, ya de manera manual, comenzaron a tumbar la nueva edificación que reemplazaba la estructura derribada.

Un diagnóstico, conocido en abril de este año, indicó que la obra nueva no era segura para la comunidad educativa que la ocupara. El 14 de ese mes la secretaria de Educación de Caldas, Diana María Cardona, dijo: "Para la futura construcción se requiere tener unas bases en una profundidad de suelo que sea segura para albergar a nuestros niñas, niños, adolescentes y jóvenes que serán beneficiados con la institución".

A partir de ese momento comenzó a rodar un cronograma con el propósito de comenzar la construcción el 3 de octubre y con la meta de concluir el proyecto en el segundo semestre del 2024.

Por normalizar

Las tareas incluyeron la instalación de aulas temporales en la cancha del colegio Los Fundadores, donde los alumnos ya reciben clases en mejores condiciones de lo que sucedió durante cerca de seis años: espacios prestados y no aptos para la enseñanza y parques como patios.

La Normal forma parte de los 21 proyectos que en el 2016 priorizó la Gobernación para el programa nacional de ampliación y obras nuevas en colegios públicos. De estos 16 están listos, entregados y en funcionamiento. Restan 5, entre ellos las normales de Salamina, San José y Riosucio. Además de la escuela José Antonio Galán, del corregimiento de San Juan de Marmato (ver recuadro En Marmato) y la del Gerardo Arias, de Villamaría.

Incumplimientos llevaron a un tribunal de arbitramiento el choque entre el contratista inicial, Mota-Engil de Portugal, y el Gobierno nacional. Eso generó más retrasos en 19 planes en Caldas, mientras se reasignaba el contrato a nuevas empresas.   

En relación con la plata para asegurar la terminación del proyecto en la Normal en Riosucio, la secretaria dijo que son cerca de nueve mil millones de pesos que están en una fiducia. "Esos recursos no se los llevó el contratista Mota-Engil. Cualquier adición la asumirá el Gobierno nacional o el Departamento".

En Marmato, ya casi

Otro de los 21 proyectos priorizados en Caldas en el 2016 para el programa nacional de infraestructura escolar, del entonces presidente, Juan Manuel Santos, fue la sede José Antonio Galán del corregimiento de San Juan de Marmato.

El rector del colegio Ramón María Vargas, al cual está adscrita la escuela en intervención, es Rútber Alexi Suárez Quintero. Comenta: "En días pasados se realizó un recorrido de preentrega con la participación del FFIE, la Institución Educativa, la interventoría, la veeduría, la Secretaría de Educación departamental. De acuerdo con eso, la firma constructora tiene un plazo para subsanar las anomalías encontradas. Ese plazo más o menos va hasta noviembre".

Añadió que también están pendientes las conexiones eléctrica y del sistema de alcantarillado. "Estos últimos dos le corresponden a la Alcaldía, ya se están adelantando algunos trabajos con la Chec, y siguen gestiones para el alcantarillado".

Allí se invierten $7.689 millones, de los cuales la Gobernación aporta $1.773 millones; el Ministerio de Educación, $5.329 millones, y la Alcaldía de Marmato, $587 millones.

"Esperamos que esta obra que se encuentra en un 99% de su ejecución llegue a feliz termino y nuestra comunidad pueda disfrutar de ella" finaliza el rector.