La debilitada paz araucana

Arauca, el corregimiento de Palestina otrora fortín de gamonales liberales, lleva un año más unos dos meses sin homicidios. Qué casualidad que coincida con que algunas acciones de la justicia han impactado el devenir político de esa población.

Hay que reconocer que algunos problemas coexisten, pero con notables cambios.  Hasta finales del 2012 y comienzos del 2013 había dos grupos en guerra a muerte por el control de narcóticos ilegales. Sin embargo, ahora hasta se juntan en una especie de mercado persa en el sector de la Carrilera, cada uno a vender sus estupefacientes.

Sin embargo, finalizando enero pasado volvieron las amenazas. Al menos así lo denunció el senador Mauricio Lizcano (del partido Unidad Nacional), cuando dijo que líderes que trabajan en campañas para Congreso en el corregimiento fueron amedrentados.

Necesitamos respuestas, porque este hecho no parece aislado. Es necesario y con urgencia atacar y erradicar la venta de estupefacientes. Y es que entre las casualidades que las autoridades se quedan sin resolver hay que revisar por qué en un poblado en donde se decide el destino de la administración de Palestina durante el tiempo de votaciones, subsistieron la política, el homicidio y la guerra por la venta de estupefacientes.

Esta última parece haber financiado las otras dos actividades. Sabemos que donde se cuela esta ilegalidad aparece la violencia. De manera que la paz araucana podría ser flor de un año si continúa a sus anchas el comercio de estupefacientes en la Carrilera.

La última casualidad, pero sí muy importante, es que ya no están presos personajes como Ferney Tapasco, Henry Calle y dicen los confidenciales de Gustavo Álvarez Gardeazabal, del equipo de trabajo de la Luciérnaga de Caracol Radio, que podrían vencerse los términos para juzgar a Carlos Hernán Trejos, diputado de Caldas, quien quedaría en libertad.

A los dos primeros los juzgaron y absolvieron, en primera instancia, por el homicidio de Orlando Sierra Hernández, subdirector de LA PATRIA (fallo que fue apelado por Procuraduría y Fiscalía), y el segundo está llamado a responder y defenderse, de una acusación por el asesinato de un sindicalista.
Casualidades que pueden afectar la paz araucana.