Ilustración sobre relaciones tóxicas

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Las personas son las responsables de lo que sucede al interior de las relaciones. Construya vínculos positivos y aléjese de donde no la pase bien.

LA PATRIA | MANIZALES

"No hay relaciones tóxicas, sino personas equivocadas con comportamientos tóxicos. Es que son los seres humanos los que establecen las conexiones. Eso es algo que hay qué pensar y evaluar".

El enunciado anterior es de Ángela María Ruiz Osorio, coach transformacional, que conceptuó sobre un asunto popular que es motivo de estudio de disciplinas como la psicología y la psiquiatría, el trabajo social y los terapeutas de pareja.

Ella, quien también es enfermera de la Universidad de Caldas, subrayó que somos seres sociales por naturaleza y que terminamos teniendo vínculos que se pueden convertir en algo saludable o perjudicial.

"Como seres humanos tenemos unas características con las cuales vivimos, que nos hacen distinguir de otros. Muchas de esas cosas han sido aprendidas de una manera consciente, otras de forma inconsciente; unas buenas y otras malas".

Modelos que afectan

Según Ruiz, existen distintos modelos de comportamiento que le inyectan toxicidad a las relaciones:

  • La dependencia emocional. "Esa es una característica que complica una relación. Afecta mucho el creer que no se puede vivir sin el otro. No podemos hacer responsables a los demás, de nuestra propia felicidad".

  • Los celos obsesivos. "El hecho de sentir que el otro es de tu propiedad no le hace bien a nadie. Ni a quien vive con celos ni a quien tiene que soportar al que los sufre".

  • Chantaje emocional. "Pasa con las relaciones donde aparece el 'si tu te vas, me muero, me suicido' o 'si me dejas, no voy a poder seguir estudiando'. Insisto que no podemos hacer responsable al otro del propio bienestar. Es muy delicado, porque a veces solo se queda en amenaza. Pero otras, se hace realidad".

  • Desinterés / Relaciones superficiales. "No se da tanto por la persona, sino por cosas que la rodean. El estatus económico y la posición social, que terminan influyendo negativamente en ese contacto".

  • Inmadurez personal. "En la medida que una persona tenga vacíos, traumas, carencias como persona, va a querer que la otra las supla. No va a hacerse cargo de sí misma, sino que va a proyectar sus inseguridades en el otro".

De la individualidad

La experta mencionó que no nos han enseñado a vernos individualmente. Recordó que las relaciones son producto de las personas que hacen vínculos, por lo que hay que preguntarse desde dónde se relacionan, si desde el amor o desde el miedo.

"Uno de los paradigmas que tenemos que transformar para lograr relaciones más sanas son las definiciones y una de ellas es la que tenemos sobre el amor. Valdría la pena hablar de esos paradigmas".

De estos precisó:

1. La definición equivocada del amor

"Yo tomo la definición del filósofo Gerardo Schmedling, quien habla de que el amor es la capacidad que tenemos de aceptar y respetar al otro tal y como es. Partiendo de ahí, nos damos cuenta de que el amor es muy difícil y no es suficiente para establecer una relación de pareja. Es muy distinto el amor, el enamoramiento y el romanticismo. Son cosas completamente diferentes.

El amor debe ser la capacidad de aceptar y respetar al otro tal y como es. Es cuando se renuncia a querer cambiarlo. Es cuando uno se olvida de las propias expectativas sobre una persona. Después de eso influyen la tolerancia y los valores".

2. La felicidad en pareja, un propósito

"Las relaciones hoy por hoy están pensadas para que encontremos nuestra media naranja. Es como si fuéramos infelices, sin otro al lado. Y eso no es cierto. No estamos incompletos, esa carga no puede recaer en otra persona.

El verdadero propósito debería ser que en ese otro encontremos un espejo que nos muestre las cosas que tenemos que trabajar, es decir, las carencias y los vacíos emocionales. Cada miembro tiene que ser responsable de sí mismo".

3. El amor se acaba

"Eso no es cierto. Ese sentimiento se transforma, lo que se acaba es el romanticismo y el enamoramiento, siendo este último un encanto biológico. Estamos hechos con hormonas o neurotransmisores y cuando nos relacionamos con otro, esa química tiene un papel muy importante. Eso dura, en promedio, entre 2 y 3 años.

Si las personas trabajan en la relación (con objetivos y con proyecciones) durante el enamoramiento, construyen la relación de pareja. Las relaciones no se encuentran, se buscan y se edifican. Nadie tiene que sentirse sacrificado en una relación".

Finalidad

"Las relaciones humanas son el arte de llevarse bien consigo mismo y con los demás, permiten el desarrollo de habilidades sociales, autorregular nuestras emociones y adaptarnos al entorno": Ángela María Ruiz Osorio.

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