Pacientes de todo el departamento se benefician del programa de Telesalud con el que cuenta la Universidad de Caldas. En esta época en la que los desplazamientos intermunicipales están regulados para evitar la expansión de la pandemia de covid-19, muchas personas de los 27 municipios caldenses han logrado por medio de este método recibir atención especializada y hallar soluciones idóneas a sus necesidades de salud. Hasta el momento unas 110 mil personas han hecho uso de estos servicios en el departamento, atendidos por 210 profesionales en permanente ejercicio.

Recientemente, en el corregimiento de Montebonito, del municipio de Marulanda, 10 adultos mayores que de otra forma tendrían que haber seguido esperando cita con especialistas, fueron atendidos de manera muy satisfactoria haciendo uso de estas herramientas tecnológicas que, a la distancia, logran un trabajo en equipo con el personal médico local y brindar un servicio de calidad y oportuno a quienes lo requieren. Desde hace seis meses esperaban la consulta, y en medio de la actual emergencia sanitaria tendrían que haber seguido en lista de espera sin saberse muy bien hasta cuándo, en algunos casos poniendo en riesgo sus vidas.

Resulta muy satisfactorio saber que esta alternativa de atención es elogiada por profesionales de otras regiones del país e incluso del mundo, por su alta dosis de innovación y creatividad, y que con su aplicación en las actuales circunstancias se le ve como una muy seria alternativa de atención a distancia de toda clase de pacientes, ahorrándoles viajes estresantes y hasta perjudiciales para su salud.

Si bien la cuarentena obligada que comenzó en Colombia a finales de marzo aceleró el uso de la telemedicina, lo cierto hoy es que su utilización será seguramente mayor en el futuro, gracias a su innegable posibilidad de llevar salud a lugares remotos. No obstante, así como en la educación se han desnudado enormes falencias en materia de conectividad para llegar a los estudiantes, igual ocurre con este tipo de procedimientos médicos en los que solo es posible brindar un servicio de calidad si las comunicaciones también funcionan de la manera adecuada.

Es necesario resaltar que se vienen aprovechando sus beneficios no solo para llevar salud física a los pacientes, sino que incluso se viene fortaleciendo la atención psicológica y psiquiátrica, lo cual tiene alcances invaluables ante la situación que afrontamos. Es así como en el camino este procedimiento ha ido ganando un mayor peso, que les permitirá a los profesionales de la medicina prestar un servicio más integral pese a las distancias. Desde luego, en muchos casos la cita presencial es fundamental, pero al no ser esto posible ahora la telemedicina ofrece opciones muy cercanas a ese contacto directo, y en muchos casos permite conocer mejor al paciente.

El aporte social de la telemedicina es algo de gran importancia que debe recibir mayores apoyos desde todos los sectores, para que cada vez más sea posible llegar con especialistas donde nunca lo han logrado. Se demuestra de esta manera que una buena combinación de ciencia médica y tecnología puede alcanzar logros vitales para la sociedad.