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LA PATRIA| MANIZALES

El 25 de marzo de 2019 Francisco Ángel Urina Osorio, a eso de las 11:00 de la mañana, en su casa del barrio Campoamor, de Manizales, maltrató física y psicológicamente a su compañera sentimental, con quien convivía, le propinó puños y patadas, además de tirarla al suelo. Las agresiones le generaron a la ofendida 12 días de incapacidad.

En mayo siguiente, ante el Juzgado Quinto Penal Municipal con Función de Control de Garantías, a Urina Osorio le imputaron violencia intrafamiliar agravada y solicitaron medida de protección en favor de la víctima.

El juicio en su contra terminó con condena de cuatro años de prisión. Le negaron la domiciliaria. La jueza indicó que se demostraron los hechos y que la pareja aún convivía bajo el mismo techo para la época del juicio oral.

"La afectada sentía temor de que Urina Osorio se llevara a su hija menor edad, o que a causa de una intervención estatal pudiera perder la custodia. Los argumentos de la defensa relacionados con que la unidad familiar aún seguía vigente y per sé (por sí mismo) no se había afectado el bien jurídico tutelado, no estaban llamados a prosperar, pues incluso el llevar los víveres al hogar no hacen parte de lo que la jurisprudencia constitucional define como familia".

Se aclaró que el hecho de que la pareja reanudara la convivencia no significa que el Estado pierda sus facultades sancionatorias frente al actuar violento dentro de la familia. El Tribunal Superior de Manizales confirmó la condena.

 

 

Al parecer, la discusión se generó por el goteo de una llave. La mujer estaba sin trabajo y él reclamó por el costo de los servicios públicos. "Me decía que me fuera a trabajar, véala, ahí echada, gorda”, dijo la afectada. En otra ocasión la cogió del cuello contra la pared y le pegó unas palmadas.

 

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