"Estoy aquí por decisión propia": Yésica Katerine Aguirre

"Cuando Yésica murió, todos se tocaron. Se preguntaron por qué la trataban de esa manera", señaló una compañera de estudio de Yésica Katerine Aguirre Canchala, de 26 años, estudiante de tercer semestre de enfermería en la Universidad Católica de Manizales.

A ella la hallaron degollada el 26 de febrero de este año en una residencia del centro de la ciudad. El pasado 17 de mayo, el CTI capturó al supuesto responsable: un hombre de 57 años al que, según el ente acusador, Yésica le habría pagado para asesinarla.

La revisión del historial de navegación en el computador de la víctima y la versión de un taxista fueron piezas clave en este caso.

En cámaras se registró el ingreso de víctima y victimario a la residencia. Además, cuando la estudiante, natural de Guachucal (Nariño), pidió una hoja y un lápiz en la recepción. 20 minutos después, el homicida salió del alojamiento, solo, y con algunas pertenencias de la joven. En la habitación quedó una nota: "Estoy aquí por decisión propia, no busquen responsables. Mami, te amo", de puño y letra de la universitaria, según análisis grafológico.

"Era muy pepa para las matemáticas. Por su inteligencia se hizo coger fastidio en el grupo, pero cuando la conocí bien supe que era tierna y muy tímida. Me decía que no le gustaba que se le arrimaran solo por sacar beneficio. A veces dormía en mi casa y se despertaba por las pesadillas. Me duele mucho lo que le pasó", relató la compañera.

Según los investigadores, la víctima sostuvo una relación sentimental paralela con un joven y el padre de este. Terminó sola y deprimida, lo que la llevaría a tomar la decisión.

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