Esta pancarta de apoyo, para con la entidad, todavía permanecía ayer en una sede de la EPS (carrera 23 No. 48 - 22).

Foto | Elizabeth R. Rojas | LA PATRIA

Esta pancarta de apoyo, para con la entidad, todavía permanecía ayer en una sede de la EPS (carrera 23 No. 48 - 22).

LA PATRIA | MANIZALES*

La edificación de Sanitas en Manizales, que está sobre la avenida Santander (carrera 23 No. 48 - 22), sirvió de plataforma el lunes para que colaboradores de la aseguradora manifestaran su apoyo a la entidad que hoy los emplea. Eso se dio allí al término de la jornada; también en otras ciudades del país.

Ellos dicen no ser responsables de la situación que advierte el Ministerio de Salud y Protección Social. Guillermo Jaramillo, jefe de dicha cartera, ha sido enfático en asegurar que la EPS no es viable.

El ministro insistió en 6AM, Hoy por Hoy (de Caracol Radio) que no le debe a la aseguradora que está financieramente mal, lo que impacta negativamente en la atención de los usuarios.

"Está en una situación de insolvencia, de hecho pidió que le autoricen el PRI. Este es un programa de flexibilización, para poder pagar, para ponerse a tono en capital y patrimonio. Solicitaron un plan de reorganización institucional", se le escuchó a Jaramillo.

Se conoció que el Estado, a través de dicho despacho, le ha entregado $5,7 billones por UPC** de usuarios del régimen contributivo, $1,6 billones por los del subsidiado y $500 mil millones no UPC durante el 2023. La EPS insiste que esos $7,8 billones, así estén siendo entregados a tiempo, no son suficientes frente a la operación.

Para Caldas

María Aurora Rodríguez, veedora en salud y líder de los usuarios de Sanitas, lamentó que sean los colaboradores los que tengan que tomar estas acciones, por temor a perder la ubicación por la que sostienen a sus familias.

"Ellos levantaron la mano para respaldar la empresa, los comentarios que hay no son los mejores y generan desconfianza. Perderían sus trabajos, su sustento, sí liquidan a la EPS. Hay mujeres cabeza de hogar (15 mil 958 dentro de la compañía), la suma de afectados en el país superaría los 25 mil. También se afectarían millones de usuarios".

Esa última complicación, según Rodríguez, se presentaría en el entendido del detrimento que está sufriendo la calidad del servicio en pacientes de EPS ya liquidadas, que son trasladados a otras aseguradoras.

"Eso lo estamos viendo en las EPS receptoras, en las que las listas de espera para las citas y/o procedimientos son cada vez más largas. La capacidad que tienen en infraestructura se va haciendo cada vez más limitada, si les van asignando más personas", criticó.

Rodríguez cree necesario un acuerdo generalizado entre EPS y Gobierno nacional para lo que se viene, más allá de la reforma a la salud, que no la ve como solución: "Urge una mesa con todos los actores, en la que se determinen las prioridades y se generen estrategias para cumplirlas. Tenemos que empezar a hablar un solo idioma. Si esto sigue así, jamás nos vamos a poner de acuerdo".

Sanitas y lo No PBS

María Aurora Rodríguez, líder de los usuarios de Sanitas, dijo que la aseguradora -a través de Audifarma- se está poniendo al día con lo pendiente en Caldas para lo No PBS (Plan de Beneficios de Salud).

Hasta el pasado 15 de noviembre, Cruz Verde (otro operador farmacéutico) era el encargado de despachar eso para los usuarios de la EPS. Dijo no más, por una deuda de $400 mil millones.

"Desde septiembre tenían cosas por entregar. Había gente esperando pañales y otros elementos. Ojalá tengan la capacidad suficiente para operar lo No PBS. En el Audifarma del Multicentro Estrella también atienden a Salud Total y Nueva EPS", subrayó la líder.

Se conoció que Sanitas les debe $829 mil millones solamente al 27% de hospitales y clínicas del país. Así lo advirtió el Ministerio de Salud y Protección Social.

La EPS tiene 5,8 millones de usuarios en el país (4,3 millones en el régimen contributivo y 1,4 millones en el subsidiado).

*Con información de www.larepublica.co y www.infobae.com

**Unidad de Pago por Capitación. Se trata del valor anual que se reconoce por cada uno de los afiliados al sistema general de seguridad social.