Que la formalización de creación de la Universidad de Caldas se haya dado hace 80 años no significa que, desde mucho antes, no se hubieran materializado esfuerzos conducentes en llevar conocimiento sobre filosofía, agricultura y artes a través del Colegio Mayor de Manizales, el Instituto Universitario de Caldas, el Liceo Caldense, la Escuela Agrícola y la Escuela de Bellas Artes, según lo relatan Albeiro Valencia Llano y Alberto Gómez Giraldo (“Evolución Histórica de la Universidad de Caldas”, 1994).
Coincide la octogenaria celebración con el surgimiento de la que es considerada la empresa más importante del departamento de Caldas: La Industria Licorera de Caldas. De estas gestas se han preocupado los organizadores y las distintas entidades públicas y privadas que, por octava vez, promocionan en favor de la identidad caldense y manizaleña la Cátedra de Historia Regional de Manizales y Caldas, Cultura y Territorio, todo un desafío respecto de la importancia en la construcción, interpretación y preservación de la memoria del territorio local y regional.
Sin arrogancia podría decirse que es un proyecto ejemplar a nivel nacional que merece ser replicado con dedicación por los municipios colombianos. No en vano y por primera vez ha recibido el apoyo y vinculación en conjunto de las entidades culturales públicas con que cuenta el Estado, como el Ministerio de Cultura, la Secretaría de Cultura de Caldas y del Instituto de Cultura y Turismo de Manizales.
A través de 17 sesiones que se realizarán los martes, a las 6:30 p.m., en el auditorio Tulio Gómez Estrada de la sede Palogrande de la Universidad de Caldas, entre el 8 de agosto y el 28 de noviembre, los ciudadanos tendrán la oportunidad de manera abierta, libre y gratuita, de entrar en diálogo con distinguidos investigadores, escritores y apasionados por nuestra historia sobre temas relacionados con caminos y caminantes de nuestro territorio, literatura, historia de Caldas a través de la música, el protagonismo de la mujer en los procesos de desarrollo regional, el fútbol local profesional, el surgimiento de otras universidades en nuestra región como la UTP, los recurrentes temas de la violencia política, los soterrados lugares de diversión clandestinos y los mitos y leyendas que se han elaborado en nuestro entorno.
Dentro de la larga lista de invitados se destacan entre otros, Carlos Alfonso Polo, Octavio Hernández, Luisa Fernanda Meza, Víctor Zuluaga, Gustavo López, Carlos Alberto Ospina, Luis Enrique García, Adalberto Agudelo Duque, Fernando Alonso Ramírez, Álvaro Gartner Posada, Jhon Jaime Correa Ramírez, Catherine López Cardona, Jaime Castañeda Hernández, Walter Castaño, Giovanni Herrera, Wilton Holguín, Andrés Elías Borrero y Héctor Fabio Torres.
En un país donde sus gobernantes cometieron el error de sacar de los planes de estudio la enseñanza de la historia, y a pesar de pretender una redención inacabada a través de la expedición de una ley que busca “restablecer” su enseñanza (Ley 1874 de 2017), la Cátedra de Historia Regional de Manizales y Caldas, se convierte en un bálsamo y en la mejor excusa para reflexionar respecto de la pregunta “¿quiénes hacen la historia y cómo la hacen?”.
Destacable, sin duda, el papel de los distinguidos historiadores y asesores del proyecto, Albeiro Valencia Llano y Luis Fernando Sánchez Jaramillo, además de un maravilloso equipo que hace posible realizar procesos de transformación cultural como la organización Piedramaní.
En Manizales es evidente la confianza que los sectores públicos y privados tienen en la cultura, referente nacional por el cual aún nos perciben a pesar de los grandes retos que en lo local se requieren al respecto. Si desea asistir a la Cátedra inscríbase en la página www.piedramani.com.