Nuevo puente, de cuatro kilómetros

COLPRENSA | LA PATRIA | Barranquilla

La nueva estructura del puente que cruza el río Magdalena, cerca de Barranquilla, tendrá una extensión de cuatro kilómetros, según lo manifestó Jorge Fandiño, quien presentó los diseños durante el VII Encuentro Regional de Infraestructura, convocado por la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI) seccional Caribe, que tuvo lugar en el Hotel Dann Carlton.

Fandiño explicó a los medios que la extensión del puente como tal, entre estribos, va a tener una longitud de 2.800 metros, pero si se suman todos los brazos de la mega-obra tendrá unos cuatro kilómetros. O sea que va a ser el más largo de Colombia, y se ubicará en un área de 90.000 metros cuadrados. Su ubicación sería cerca a la actual estructura del puente Laureano Gómez y el nombre aún no está definido, pero ya se ha pensado en llamarlo ‘Gabriel García Márquez’.

Fandiño reveló que el costo del nuevo proyecto es de $720 mil millones: $432 mil millones que es el costo directo del puente, a lo cual se le agrega el valor de las vías de acceso y complementos, incluida la torre de control, administración y adecuación e interventoría con un costo de $288 mil millones.

Según el Gobierno, los recursos se tendrán a partir del 2015 y lo más seguro es que Planeación Nacional haga los aportes para que el proyecto sea un éxito. Los estudios de los diseños tuvieron una inversión de $12 mil 500 millones por la firma Ecopuentes.

El 30 de mayo se terminaron los diseños definitivos del nuevo puente y se espera que próximamente salga la licitación para adjudicarla e iniciar la construcción. El puente proyectado está diseñado bajo los nuevos parámetros de la ingeniería moderna en el mundo. Es un puente mixto, cuya luz central de 380 metros estará conectada por dos puentes de acceso con luces de 70 metros.

De acuerdo con Fandiño, la construcción puede tener una duración de cuatro años y la demolición del actual es de un año aproximadamente, con un costo de $25 mil millones, toda vez que se va a implementar una tecnología especial o de inversa para que no haya problemas a futuro con las vigas que fueron construidas en el río Magdalena. Esta tarea se ejecuta cuando se hagan las pruebas de carga del nuevo puente.

De las novedades es que contará con dos calzadas, cada una de tres carriles, lo cual va a permitir que el puente trabaje con niveles de servicios adecuados en los próximos 50 años.