"Gobierno, con razones para negociar de forma discreta"

COLPRENSA | LA PATRIA | Bogotá

El presidente Juan Manuel Santos dijo ayer, durante su intervención en el foro de libertad de prensa, que el Gobierno tiene razones para negociar de forma discreta. El jefe del Estado agregó que una es “protegerlo de quienes quieren envenenar el proceso”.

De acuerdo con el mandatario, el Gobierno decidió hacer una negociación discreta, a pesar de las quejas de los medios de comunicación, por razones estratégicas en términos políticos y militares.

La primera de ellas es que la negociación de paz tiene unas condiciones militares muy especiales y es que no habrá cese al fuego durante el proceso. El motivo por el que el Gobierno decidió esto es la experiencia que el país ha tenido en el pasado. En la negociaciones del Caguán, por ejemplo, “la guerrilla tomó ventaja de la zona de despeje como forma de rearmarse e incrementar su fuerza”, dijo Santos.

Según el Presidente, otra forma en que la guerrilla históricamente se ha aprovechado del cese al fuego es usar esa oportunidad para acusar al Estado de no cumplir con el mismo “y así tener excusa para seguir cometiendo actos de terrorismo”.

La historia

Basándose en la experiencias del pasado, el presidente Santos aclaró que si este proceso no se concreta, no quiere que la historia señale a su Gobierno “por haberle entregado a la guerrilla una parte del territorio nacional dándole además la oportunidad de fortalecerse”.

La otra razón para negociar de esta manera es la necesidad de “blindar el proceso contra los intereses opuestos a la paz”. Por esta razón, la mesa de negociaciones no publica acuerdos parciales, sino que espera a que las dos partes estén en la misma sintonía y se llegue a un acuerdo concreto.

En este sentido, el Presidente recordó una vez más que “nada está acordado, hasta que todo esté acordado” y que la divulgación de lo que se ha acordado antes de terminar todo el proceso puede acabar malográndolo.

De acuerdo con el jefe del Estado, “si se acuerda, por ejemplo, dar la oportunidad de participación política a la guerrilla, sin haber llegado aún a un acuerdo sobre las condiciones del desarme, esto da la oportunidad perfecta a los enemigos de la paz para boicotear el proceso”. Agregó que la oposición “desde ya está queriendo acabar el proceso mediante campañas de desinformación”.

Con respecto al tema, el presidente Santos concluyó diciendo que los acuerdos a los que se lleguen durante el proceso se revelarán cuando estén completos. En este momento, habrá una refrendación popular que, según Santos “no implicará una asamblea nacional constituyente”, sino que se hará por otros mecanismos que aún se están estudiando.

Malentendidos

Como respuesta a los sectores que se han declarado opuestos al proceso de paz, el presidente Juan Manuel Santos aclaró varios de los malentendidos que, según él, se vienen dando desde que se iniciaron las negociaciones en La Habana.

La primera de ellas es que las declaraciones que se hacen fuera de la mesa de negociación, especialmente por las Farc, no necesariamente corresponden a lo que se están negociando en el interior. Estas declaraciones de las Farc sobre su renuencia al desarme y demás cosas han dado mucho de qué hablar y han hecho especular a la opinión pública sobre cosas que no están ocurriendo en el proceso, aclaró.

Otra de ellas es que “no existirá un acuerdo de paz si no hay desarme”, por lo que si las Farc dicen que deciden guardar las armas para garantizar el cumplimiento de los acuerdos, no se firmará la paz.

También aclaró el tema sobre la impunidad a la que podría conducir el proceso, afirmando que “no puede haber paz sin justicia para las víctimas”, y agregó que este es un punto que ni siquiera se ha empezado a negociar, por lo que no debería haber aún especulación al respecto.

Momento de definiciones

Desde hoy, y por 10 días más, serán las conversaciones en la mesa de negociación entre el Gobierno Nacional y las Farc, que tienen como punto central la terminación del primer punto de la agenda pactada, referente a los temas agrícolas.

El mismo se estaría cerrando en el momento en que el presidente Juan Manuel Santos está por definir quién será el nuevo ministro de Agricultura, en reemplazo de Juan Camilo Restrepo, quien renunció hace un mes, pero tan solo el viernes pasado le fue aceptado su salida del gabinete presidencial.