COLPRENSA | LA PATRIA | Bogotá
Por medio de una acción de tutela radicada ante la Sala Civil del Tribunal Superior de Bogotá, la defensa de Camilo Torres, alias ‘Fritanga’, le exige a la Policía Nacional y a los medios de comunicación que retiren las fotos y los videos que han publicado de la fiesta de su matrimonio, evento en el que fue capturado.
Con la acción judicial, el jefe de ‘Los Urabeños’ quiere que se le respete su intimidad, asegurando que su nombre, así como el de la mayoría de las personas que asistieron al evento, debe respetarse.
La acción fue interpuesta por el abogado Diego Álvarez Betancourt, quien asegura que con la publicación de las fotos y los videos, al cual asistieron diferentes artistas colombianos y extranjeros, se violó la privacidad teniendo en cuenta que ese evento era íntimo y personal, por lo que la imagen de su representado se vio dañada, así como la de su grupo familiar.
En la petición también se dice que la publicación de las imágenes puso en peligro a su familia y la seguridad de quienes los acompañaron a la boda. Así como el perjuicio a los artistas que fueron contratados para el matrimonio.
'Fritanga' fue capturado por unidades de la Dijín y de la Armada, en la isla Múcura, situada a dos horas de Cartagena, en el archipiélago de San Bernardo, golfo de Morrosquillo.
Camilo Torres debe su apodo a que estaba acostumbrado, en las fiestas y recepciones que ofrecía con frecuencia, a brindar en abundancia a sus invitados ese plato de la cocina típica colombiana.
Cuando cayó en manos de las autoridades, se encontraba, junto con sus cerca de 150 invitados, en la mitad de una maratónica fiesta de bodas que estaba programada para que tuviera lugar entre el martes 26 de junio y el martes 3 de julio.
Cada jornada que conformarían esa semana de festejos con ocasión de su matrimonio sería una fiesta temática. Por esta razón, cuando las unidades de la Policía y de la Armada llegaron a lugar, los invitados y el propio ‘Fritanga’ creyeron que los uniformados eran parte de una comparsa organizada en la programación.
Ni siquiera el hecho de que las autoridades hubieran llegado con algunas unidades caninas despertó sospechas entre quienes estaban en la fiesta. Incluso, había algunos incrédulos que aún estando tendidos en el piso, con las manos en la nuca, bajo los gritos de “¡Quédense quietos!”, “¡No se muevan!”, seguían pensando que la captura era el tema de la fiesta de ese día.
Los uniformados habían copado el lugar y así terminaba la fiesta. Minutos después, apareció ‘Fritanga’, abrazó a su esposa, y mientras ella sollozaba sobre su pecho, le dijo: “Amor, te amo”. Le dio un beso y después se dirigió a los invitados: “¡Hey! ¿Sabés qué? Conocieron al ‘parcero, al amigo, y seguiré siendo el amigo ‘forever’”.
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