El complejo trámite que le queda a la ley anticorrupción

COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ

La ley que impone nuevas y severas medidas para quienes estén incursos en actos de corrupción tiene en su trámite final una compleja situación, debido a que tendrá que ser conciliada entre el Senado y la Cámara hoy o mañana, de lo contrario se hundirá, porque este jueves terminan las sesiones ordinarias del Congreso de la República.

Se trata de la llamada ley anticorrupción, la cual fue aprobada en la noche del lunes por el Senado, pero que ahora, por lo encima que está el cierre de la presente legislatura, puso en aprietos a los integrantes de la Cámara de Representantes, quienes tendrán que surtir el proceso en menos de dos días, que es lo que falta para el cierre de las sesiones ordinarias.

Además, obligaría a dejar 90 leyes sin discutir, entre ellas la que moderniza el sector de las TIC, que tenía prioridad para el Gobierno y que fue aprobada semanas atrás después de la insistencia de la ministra, Silvia Constaín. Por lo menos así lo manifestó el presidente de la Cámara de Representantes, Alejandro Carlos Chacón.

“Muy difícil, hoy es 18 de junio y la legislatura se acaba el 20 de junio. En este preciso momento no tengo aún, ni siquiera, el texto que se votó, no puedo escoger un conciliador”, sostuvo Chacón, quien insistió que si el texto no llega a la Corporación, no se podrá avanzar.

En cuanto a los tiempos que le quedan, Chacón puso como ejemplo que el Senado “solo en impedimentos demoró cinco días, acá muy seguramente los representantes tendrán que presentar los mismos y deberé tramitarlos, sacrificando proyectos muy importantes para el país que podrían arriesgarse”, concluyó.

Chacón advirtió que en la conciliación será necesario revisar si se cumple con la conexidad de los textos, porque cada corporación aprobó unos diferentes. Además, en Cámara se votó el año pasado, cuando los congresistas eran otros, los representantes que hay hoy no la discutieron, eso llevará a que haya una feria de impedimentos.

La senadora de la Alianza Verde, Angélica Lozano, indicó tras la aprobación el lunes que “la estrategia de dilatar, dilatar y dilatar, llevó a que el proyecto esté prácticamente hundido”. Incluso, sostuvo que ella lo da por “hundido”, pero “la práctica dilatoria fue eficaz, eso hace que la Cámara lo recibe a punto de morir”.

Por el contrario, el senador ponente, Germán Varón de Cambio Radical, se mostró confiado en que la conciliación se logré mañana con la Cámara, e indicó que se incrementan las penas como concusión, cohecho y prevaricato, de tal manera que en el caso que se solicite la máxima pena y si la persona se allana a cargos no pasará lo de ahora que le bajan la pena.

El fiscal General de la Nación (e), Fabio Espítia, sostuvo el lunes que “falta solo la conciliación, pensamos que debe ser algo sumamente rápido y se ha logrado estructurar un conjunto normativo que nos sirve para reprimir fuertemente la corrupción administrativa”.

El proyecto

Con lo aprobado en la plenaria del Senado el lunes, se dio paso a que los corruptos, cualquiera que sean, no puedan pagar su condena en la casa como sucede hoy, y tampoco se podrá pagar la condena, en el caso de los altos funcionarios públicos, en una estación de Policía o un batallón.

A los funcionarios que filtren información se les duplicó la condena de cuatro a ocho años, más no se limita la libertad de prensa a los periodistas, en el sentido que no deberán revelar sus fuentes de información. También se aprobó el fin de los acuerdos interadministrativos, de las formas de mayor corrupción en la administración pública.