Laura Alejandra Flórez Aguirre, de 28 años, junto con otros profesionales, integraban una comisión de exploración al servicio de la multinacional minera canadiense Continental Gold en Ochalí, corregimiento de Yarumal (Antioquia). Sin embrago, en la madrugada del 20 de septiembre, exintegrantes del frente 36 de las Farc ingresaron al campamento y asesinaron a Laura y a otros dos compañeros más.
La egresada del Colegio de Cristo y de la Universidad de Caldas se crió en el barrio La Sultana, y en la iglesia Esperanza La Macarena de ese barrio, acudieron familiares y amigos para despedirla. Sus allegados la recordaron como una mujer soñadora, noble y dulce, que luchó siempre por alcanzar sus sueños.
Ella se definía a sí misma como “una geóloga de exploración”. Más que esto, para sus familiares era una mujer juiciosa y entregada a su familia, que a su vez amaba su profesión.
“Todos los que conocemos a Alejandra sabemos cuánto amor tenía para darnos. Una persona sin maldad en el corazón, que solo daba luz a donde quiera que llegaba”, dijo Michael Castro, primo de la víctima.
Murió el 20 de septiembre.
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