En cenizas quedaron pertenencias de tres familias de Bajo Villa Jardín

LA PATRIA|MANIZALES

Angustiada y mientras miraba cómo ardían sus muebles, electrodomésticos y ropa, Doralba Zuluaga le daba gracias a Dios porque su familia no estaba en la casa a las 8:40 de la mañana de ayer. A esa hora, las llamas consumieron las pertenencias de cinco familias, que habitaban dos casas de esterilla en el barrio Bajo Villa Jardín. Por fortuna, nadie resultó lesionado.

Doralba y su esposo, Lemis Giraldo, estaban trabajando; la hija menor de la pareja estaba donde la abuela materna, y la mayor, estudiando. "Se perdió todo, pero qué se va a hacer, toca volver a empezar. Gracias a Dios mi hija no estaba, ella no va a estudiar cuando se enferma, pero hoy sí fue. Me enloquezco si le pasa algo", decía Doralba, parada en la esquina de la que fue su vivienda en los últimos cuatro años.

Según Jorge Iván Quintero, comandante del Cuerpo Oficial de Bomberos, recibieron la llamada de emergencia a las 9:03 de la mañana. "Dos viviendas se quemaron, en ellas vivían tres familias. Además, hay dos casas con afectaciones parciales. Estamos tratando de establecer las causas del incendio, pero parece que en una de las viviendas dejaron alimentos en la estufa encendida, pero está por corroborarse". A pesar de esto, Doralba, cuya casa era la única en la que no había gente, asegura que no dejó nada encendido.

Rosa Ortega, vecina del sector, dice que en el momento en el que se enteraron del fuego, trataron de apagarlo con agua, pero la presión de las tuberías no fue suficiente.

Los otros damnificados

Rubio Candamil habitaba en la otra casa quemada. Cuenta que estaba desayunando y en ese momento un vecino se le acercó a preguntarle si alguien estaba quemando leña en el sector. "Le dije que no, que por qué, y me dijo que salía humo. Cuando subí y me asomé, vi que la casa de arriba se estaba incendiando, y nos salimos mi hija y yo", relata.

Jorge Andrés Díaz y su familia también perdieron todo. Llevaban un mes viviendo en los bajos de la casa de Doralba, y quedaron solo con la ropa que tenían puesta ayer.

"Mi esposa estaba con mi hija de 15 meses en ese programa de Cero a siempre, yo estaba solo y el incendio empezó por la parte de arriba. Quedamos sin nada, llegué a vivir acá y lo perdí todo", decía desconsolado.

Desde ayer, estas tres familias buscan dónde vivir. Según Jorge Andrés Bernal, director técnico de la Unidad de Gestión del Riesgo de la Alcaldía de Manizales, quienes eran propietarios reciben dinero para tres meses de arrendamiento, mientras que a los arrendatarios les entregan para un mes, correspondiente a $250 mil. "Por ser una zona de alto riesgo, estas viviendas están incluidas en el aseguramiento colectivo de la Alcaldía. Desde hoy (ayer) se les entrega el dinero para que busquen vivienda. Además, con Desarrollo Social se les proporciona atención psicosocial", explicó el funcionario.