Celac y UE inician una nueva era

La Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) iniciaron este fin de semana en Santiago una nueva era en su relación estratégica, conscientes de que se necesitan mutuamente para complementar sus economías y consolidar el multilateralismo.

"Esta convicción compartida de que dependemos el uno del otro es lo que forma la base de nuestra relación", indicó en una rueda de prensa el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, al término de dos días de cumbre en la que participaron 60 delegaciones europeas y latinoamericanas.

La gran novedad de la séptima cumbre que celebraron las dos regiones fue que los países de América Latina y el Caribe acudieron agrupados en un solo bloque, la Celac, un organismo de integración regional impulsado por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, el "gran ausente" de esta cita, debido a su cáncer.

La naciente organización ha abierto la puerta a un nueva era en las relaciones con la Unión Europea, determinadas también por el hecho de que América Latina muestra un sólido crecimiento económico, mientras que el Viejo Continente vive en recesión.

El presidente chileno, Sebastián Piñera, anfitrión de una cumbre elogiada por sus homólogos, llamó desde la apertura a crear una nueva alianza estratégica, con una relación "menos vertical y más horizontal, evolucionando desde la asistencia hasta la verdadera cooperación".

La Declaración de Santiago resultante de este encuentro hace un repaso a los extensos ámbitos de cooperación de ambas regiones, que iniciaron su relación estratégica en 1999.

El tema central de la reunión era propiciar inversiones de calidad que favorezcan a los ciudadanos y sean respetuosas con el medio ambiente.

Pero fue la seguridad jurídica de estas inversiones el asunto más polémico de la cumbre, especialmente después de recientes nacionalizaciones que en Argentina y Bolivia afectaron a capitales españoles y, en Venezuela, a estadounidenses, españoles y franceses.

A pesar de la discrepancia en este tema entre los países europeos y algunos latinoamericanos, la declaración final reafirmó la importancia de contar con marcos reguladores "estables y transparentes" que proporcionen "seguridad jurídica para los operadores económicos".

Sin embargo, también reconoce el derecho de los países a legislar para cumplir los objetivos de sus políticas nacionales, de acuerdo con sus compromisos y obligaciones internacionales".

Oposición

La Alianza Bolivariana para las Américas (formada por Bolivia, Cuba, Ecuador y Venezuela, entre otros) y Argentina se opusieron a que la declaración incluyera el compromiso de los países latinoamericanos a garantizar esa certidumbre legal.

La UE es el principal inversor extranjero directo en los países de la Celac, y en 2010 acumulaba una inversión extranjera directa en la región de 385.000 millones de euros, superior a las de Rusia, India y China juntos.

Mientras que los socios de la Celac pusieron encima de la mesa un crecimiento económico del 3,1 % en 2012, los Veintisiete hicieron hincapié en los esfuerzos puestos en marcha para materializar su recuperación económica, complementando su unión económica y monetaria, y enfatizaron que su economía sigue siendo la más importante del mundo.

Piñera saludó con optimismo los progresos europeos y se mostró "absolutamente convencido de que se han tomado los pasos" para superar la crisis.

La cita de Santiago también sirvió para acordar que Chile y México revisen sus respectivos acuerdos con la UE, que tienen mas de 10 años, y celebrar la próxima entrada en vigor de los tratados de libre comercio de Colombia y Perú con la Unión Europea, así como el acuerdo de asociación de Centroamérica con los Veintisiete.

Además, el bloque europeo y Mercosur acordaron avanzar en sus estancadas negociaciones para un acuerdo de asociación con una reunión fijada para el último trimestre del año.

Otras decisiones

*Los mandatarios también dieron luz verde a un plan de acción para el periodo 2013-2015, que les servirá para intentar plasmar con acciones concretas los objetivos consensuados en la cumbre, y que incluye como novedad capítulos específicos sobre inversiones y para frenar la violencia machista.

*Tanto la UE como la Celac acordaron seguir defendiendo el multilateralismo, así como potenciar su colaboración en asuntos de interés mutuo y a nivel mundial como la estabilidad internacional, el desarrollo sostenible, el cambio climático, la justicia social, los derechos humanos, la lucha contra la droga y el crimen organizado y la seguridad.