Menor de edad escondida detrás de un oso de peluche

Foto | www.freepik.es | LA PATRIA

Caldas tuvo 22 casos por explotación a menores de edad en el 2022.

Autor

Una patrulla de la Policía que realizaba labores de control a establecimientos nocturnos en Norcasia, encontró el pasado martes a dos menores de edad dentro de un prostíbulo en la zona de tolerancia. Sin embargo, se desconoce qué hacían en el lugar.

A las adolescentes, de 15 y 17 años, las entregaron a la Comisaría de Familia y permanecen internadas en un hogar sustituto, mientras se adelanta el restablecimiento de sus derechos.

Por otro lado, a los administradores del negocio, en donde estaban los jóvenes (un hombre y una mujer), los trasladaron a la estación de Policía, en donde los individualizaron. Al establecimiento le suspendieron la actividad comercial por 10 días por tener a menores en sus instalaciones y la Inspección determinará la multa que deben pagar.

Aunque se presumía que estas personas estaban permitiendo que las adolescentes ejercieran la prostitución, la Policía informó que será ahora un grupo de investigadores el encargado de determinar qué hacían las menores allí y si efectivamente las estaban sometiendo a un caso de explotación sexual comercial de menores de 18 años.

Diego Fernando Olarte Alzate, alcalde de Norcasia, explicó que se llevó a cabo un consejo de seguridad para analizar la situación y debido a que no se presentó una flagrancia y tampoco hay una denuncia ciudadana, es complicado responsabilizar a estas personas, más allá de la aplicación del comparendo por presencia de menores.

“Queda un sinsabor porque la Policía hace su trabajo, pero esos vacíos normativos no permiten la judicialización de quienes se aprovechan de las necesidades de los jóvenes. Vamos a seguir trabajando con la autoridad y la Comisaría de Familia, con controles a estos establecimientos”, indicó Olarte.

Añadió que ante el creciente turismo en el municipio se corre el riesgo de que se presenten casos de explotación sexual y de abuso de niños y adolescentes, por lo que se extenderán las labores prevención en otros espacios, como en hoteles. Aclaró que no es común ver estas situaciones en Norcasia.

Los mitos de la explotación

Según el ICBF, estas actividades ilegales están naturalizadas en la sociedad y persisten mitos y pueden darse tanto en contextos físicos como digitales, especialmente en contextos de viajes y turismo, zonas de frontera, corredores viales y fluviales, o en sitios donde se practica minería o se desarrollan obras de infraestructura.

- Se prostituyen o ejercen el trabajo sexual: La explotación sexual comercial de niños, niñas y adolescentes no es un trabajo, es un delito y grave violación a los derechos humanos. Las principales causas para que sean víctimas, son la falta de dinero, el consumo y la pobreza.

- Se prostituyen porque les gusta, porque quieren y ya saben lo que hacen: Ellos son los más vulnerables a la manipulación económica, al chantaje afectivo, la intimidación, la amenaza, la seducción y el engaño. Afirmar que fue decisión de ellos es ignorar la violencia y la opresión sobre ellos.

- Los explotadores son enfermos sexuales (pedófilos): El explotador puede presentar situaciones patológicas, pero generalmente no es un ser excéntrico ni un perturbado mental.

- Quienes inducen y explotan sexualmente a niños son desconocidas: En muchos casos, los menores inician su tránsito hacia la explotación por presión y acoso sexual de parientes, vecinos y amigos. Los proxenetas suelen establecer una falsa relación afectiva para luego obligarlos a retribuir esos “favores recibidos”.

Caldas, entre los de más denuncias

*El ICBF reportó en el 2022 la apertura de 235 casos de protección a menores por explotación sexual comercial. El 87% son niñas y adolescentes mujeres, el 86% tienen entre 12 y 17 años.

*Las regiones con mayores casos son Bogotá (46), Antioquia (28), Valle del Cauca (24), Caldas (22), Norte de Santander (16) y Bolívar (13).

*Red PaPaz indicó que en el 2023 se registraron 405 hechos y en el 2024, con corte a enero, van 35. En estos dos últimos años no hay reportes en Caldas.