Fotos | Lector | LA PATRIA Ofelia Cardona de Avendaño rodeada de mensajes de amor y admiración.

Mamá, hoy toda la familia y amigos celebramos tu cumpleaños. El tenerte entre nosotros es el mejor regalo que Dios nos ha dado, tú has sido nuestra guía, nuestra motivación y el ejemplo a seguir. Hoy festejamos por todo tu camino, por aquello que tú misma conseguiste con esfuerzo y por la persona que eres.
Acabas de cumplir 80 años de matrimonio y si mi padre viviera estaría muy feliz; sé lo que él representó en su vida y aún lo recuerdas como si fuera ayer. El muy famoso ¡Loquito Avendaño¡ quien desde su juventud fue un aficionado y gran bailarín de tango en Manizales, dejó una gran familia que hoy lo llevamos todos en nuestros corazones.
Mamá llevo 26 años cuidándote y tratando de que siempre estés en la mejor forma y manera posible, desde que murió mi papá has estado conmigo en las buenas, regulares y malas épocas, he luchado siempre con el apoyo del todopoderoso para que nunca te falte nada, pues sé que la mayor recompensa que existe en la vida es ser buen hijo.
Con mucha alegría comparto esta fecha reconociendo que es la mejor mamá, abuela, bisabuela, tatarabuela, suegra, tía y amiga.
Mujer incansable, nunca en su vida se ha quejado de las situaciones difíciles como en la enfermedad, en los casos de muerte de sus seres queridos: papá, mamá, esposo, 5 hijos, hermanos, primos, etc., aceptando con entereza, humildad y resignación los designios del todopoderoso. Algunas veces dejó caer lágrimas por sus mejillas, pero es tal su fortaleza y capacidad de resistencia que supo sobreponerse a los recuerdos dejados en su corazón por aquellos que fueron muy importantes en su vida.
Mujer guerrera, excelente ser humano, madre ejemplar que inculcó a sus hijos el respeto, valores y buenos principios para ser mejores personas a lo largo de nuestras vidas, cosas que hoy perduran en sus hijos y en su descendencia.
Digna de admiración total, ver que a hoy puede valerse por sí misma en sus cosas personales, aunque cuando haya dificultades propias de la edad no falta una mano amiga.
Querida mamá hoy celebramos tu vida, tu cumpleaños, es muy emocionante y motivo de orgullo para nosotros familiares y amigos tener una mujer que hoy nos muestra y enseña cómo llegar a 100 años sin perder su esencia, con sus recuerdos, energía, sonrisa, hermosa cara y muy buena memoria.
Doy gracias a Dios por un año más de vida de mi mamá, una persona que adoro y de la que he aprendido mucho.
Tu hija Amparo Avendaño Cardona.