Libros, música y poesía en la Casa de la Cultura de Salamina

Luis Fernando Rodríguez García

LA PATRIA | MANIZALES

El pasado sábado, la Casa de la Cultura “Rodrigo Jiménez Mejía” de Salamina, realizó en el parque de Bolívar una Jornada Cultural, que mostró los resultados de los procesos de formación en música, la danza y el dibujo. Además hubo taller de elaboración de faroles, manualidades, venta de libros y poesía.

“El propósito de estos eventos es fomentar el amor por el arte y la cultura. Potenciar las habilidades de las personas y construir tejido social”, dijo la gestora cultural de la Casa de la Cultura, Astrid Dayana Agudelo.

“En este momento tenemos un proceso de iniciación musical con niños, enfocado al trabajo coral y otro con jóvenes y adultos, orientado a conformar una Orquesta de Cuerdas Típicas. Hoy mostramos a los salamineños parte del proceso”, dijo, Andrés Meléndez Álzate, licenciado en música.

A concurso

El conjunto de cuerdas lleva un año trabajando y tiene una base de guitarras, mandolina y tiple. Presentaron en el tablado de la plaza de Bolívar, dos temas del folclor colombiano y un tema del repertorio instrumental. “Este año nos inscribimos para participar en El Pequeño Cumanday en Manizales”, dijo Meléndez Álzate.

El semillero del proyecto de la Orquesta de cuerdas se tiene hace dos años y el próximo martes, 13 de noviembre, tres de sus integrantes, se presentaran a las 7:00 de la noche en el auditorio de la Universidad Nacional.

En esta ocasión, el grupo de Iniciación Musical, interpretó tres temas infantiles en formato coral, acompañados por instrumentos de percusión.

Poesía

Como invitados estuvieron los poetas: Martín Rodas, Uriel Quintero y Carlos Mario Uribe, director de la Fundación La Nave de Papel. Quien se comprometió desde la Secretaria de Cultura de Caldas y el Consejo Departamental de Literatura a llevar las inquietudes. “Porque nos interesa vincular, mucho más, los procesos literarios con niños, formar público lector y acoger las nuevas voces de la poesía en Salamina”, precisó. Y concluyó: “en estos momentos, en donde hay tanta guerra y desigualdad, la poesía por naturaleza es el lenguaje natural de paz”.