Nivel de embalse de La Miel, en el 17%

JUAN CARLOS LAYTON

LA PATRIA | MANIZALES

Tan solo en el 17% de su nivel se encuentra el embalse de la energética La Miel I, ubicado en el oriente de Caldas. Este se califica como el tope mínimo histórico de su capacidad. La esperanza es que no habría racionamientos ni aumentos en las tarifas de energía.

Durante su participación ayer en el conversatorio por el agua, organizado por el diario El Espectador, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF Colombia) e Isagén, el presidente de la energética, Luis Fernando Rico Pinzón, resaltó la preocupación en el país por el déficit en plantas como esta, ciento por ciento de Isagén.

Este hecho lleva a que hoy La Miel esté generando prácticamente con el cuadal ecológico, y con los mínimos permitidos por la licencia ambiental, hecho que en su concepto es histórico.

Aunque esto significa que la energética puede seguir generando y hay agua suficiente, también reconoció que el embalse no se está recuperando y el agua que llega solo permite mantener ese nivel ecológico. "Esperemos que este mes de octubre y noviembre, que son meses de recuperación, se mejore en algo el embalse", confió.

También insistió en que la ventaja es que hay otros embalses con mayor capacidad en el país, lo que se califica como el embalse agregado, que en suma permiten una capacidad que rodea el 60%.

A eso se suma la generación térmica, que en este momento atiende la mitad de la demanda nacional.

Esto le permite señalar que el país podría enfrentar el Fenómeno de El Niño, sin riesgo de racionamiento.

Aumentos de energía

Aunque también se ha hablado de la posibilidad de incrementar los costos energéticos, Rico Pinzón insistió en que aunque los precios en la Bolsa de Energía muestran la escasez y el ajuste, también es claro que entre el 80% y el 85% de esa demanda se contrató hace tiempo.

Eso permite pensar que no habrá efectos en los precios, y que la sequía no los afectará. "Se afectaría la demanda que no se haya contratado, por lo que se puede dar tranquilidad", indicó.

También celebró el hecho de que se comiencen a aplicar sanciones por exceder el consumo, pues en su concepto es una forma de concientizar la población. "Es triste decirlo, pero hay veces que aprendemos por medio del bolsillo y por eso se hace necesaria una norma como la que hoy aplica la CRA (Comisión de Regulación de Energía y Agua Potable)".

Conversatorio regional

Rico Pinzón destacó que aunque este tipo de eventos se realiza desde hace unos tres años, este año se optó por regionalizarlo, con el fin de recoger las propuestas e inquietudes que se presentan en los departamentos, y socializarlas en un encuentro nacional.

Según el dirigente, el mayor problema que se ha identificado es la falta de educación y de conciencia para proteger el líquido, pues aunque existen muchas normas, no se respetan.

"Hemos tenido tanta abundancia de agua en Colombia, hasta el momento, que pensamos que siempre va a estar allí y no ha habido un desarrollo nacional ni en las regiones para conocer el recurso y protegerlo", resaltó.

Entre las propuestas, el presidente de Isagén planteó opciones como un sistema de información y conocimiento sobre el agua, liderado por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam), con información comprensible para toda la población.

También habló de la importancia de un fortalecimiento institucional, no creando nuevas entidades, sino mejorando las que hay, con mayor claridad sobre sus roles y responsabilidades de cada una.

La frase

"Hasta hace poco los colombianos pensábamos que el agua era un recurso inagotable y hoy evidenciamos que no es así y que hay que tener conciencia de su cuidado, pues cualquier uso la afecta, por lo que se necesita la mayor inteligencia y ahorro posible", insistió.

Presidente de Isagén, Luis Fernando Rico Pinzón

Miel I

La central Miel I, localizada en el municipio de Norcasia, forma parte del potencial hídrico del oriente de Caldas, región conformada por las cuencas de los ríos Guarinó, La Miel, Moro, Manso, Samaná Sur y afluentes menores, como los ríos Pensilvania y Tenerife. Tiene una capacidad instalada de 396 MW (Megavatios) en tres unidades. Inició su operación comercial en diciembre del 2002.