JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
"El doctor Pablo Muñoz (exgobernador de Caldas) tiene dos grandes habilidades, entre muchas otras: el análisis de empresas en dificultades y la liquidación, cuando no hay posibilidades de salvación. La parte a la que estamos apelando con el doctor Pablo es la primera".
Con estas palabras el gobernador de Caldas, Julián Gutiérrez Botero, destacó el trabajo que se viene haciendo con el exmandatario departamental para sacar adelante la Licorera de Caldas (ILC), dentro de un plan que describió hace cerca de un mes como de "superchoque", ante las dificultades que arrastra la destilería regional.
Lo anterior, luego de las pérdidas que reportó la empresa en 2013, por cerca de $4 mil millones, y de medidas como las que tomó la firma auditora Price Waterhouse de abstenerse de opinar sobre los estados financieros, al dudar de su confiabilidad. Eso a la par del desacuerdo en la junta directiva.
De allí la decisión del gobernador de "tomar el toro por los cachos y hacer lo que haya que hacer al costo necesario, bien sea un socio estratégico, privatización o liquidación".
No obstante, después de la reunión con el exmandatario departamental, anunció que la principal búsqueda es salvar la empresa, por lo que se comenzó a trazar un plan de acción para conformar comités que analicen la compañía y hagan recomendaciones. Entre ellos sobre el plan laboral y el retiro voluntario, la situación financiera y el manejo administrativo.
"Entonces vamos a tener unos comités de pocas personas, pero de alto turmequé para que se reúnan, estudien y nos hagan las recomendaciones que se deben hacer", indicó.
Aseguró que una vez conformados los comités, se establecerá un cronograma, con el fin de tener resultados pronto.
De gobierno a comité
El exgerente Bruno Seidel Arango propuso medidas como un gobierno corporativo para que todas las fuerzas vivas pasen del respaldo al compromiso. Sin embargo, el gobernador estimó que la situación es muy similar a la de los comités. "El gerente tenía una concepción y nosotros algo similar, pero todos estamos trabajando a lo largo de las mismas líneas".
Aunque hoy ya se cumplen seis días con gerente encargado en la ILC, Gutiérrez consideró probable que de estos comités salga la terna o el nuevo gerente que maneje las riendas de la entidad.
Esto da para pensar que Mauricio Ruiz González, gerente encargado, podría estar un tiempo más prolongado del que se estimó, pues en palabras del mandatario departamental no hay afán, y se busca tomar la mejor decisión. "No estamos ni dando palos de ciego, ni tenemos ningún afán. Lo que queremos hacer, lo queremos hacer con juicio", aseveró.
También calificó a los tres sindicatos de la destilería como una parte importante de esta ecuación, por lo que dijo que están conversando y que tendrán que hacer sus aportes para recuperar la ILC.
Lo anterior considerando que el exgerente aseguró que cuando a estos grupos les tocan sus intereses ahí sí dejan de respaldar.
No hay renuncia
Aunque persisten las dudas con respecto a la renuncia del gobernador, e incluso algunos advierten que sería después de julio, para no tener que convocar a elecciones, Gutiérrez negó este hecho.
Aseveró que su interés es terminar el mandato, al que tiene derecho por Ley.
La frase
"Nuestro compromiso va hasta que se termine el período, el 31 de diciembre del 2015, y salvo que Dios designe otra cosa, la voluntad nuestra es trabajar todos los días con más juicio y más empeño por arreglar los problemas del departamento de Caldas", aseveró.
Gobernador de Caldas, Julián Gutiérrez Botero
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