Osvaldo Hernández

LA PATRIA | Manizales

Hubert Bodhert será el técnico del Once Caldas para la próxima temporada. El anuncio lo hizo Tulio Mario Castrillón, presidente del Club, en Caracol Radio. Minutos después, Rusbel Franco, periodista de dicha casa radial, sintetizó la información en su cuenta de Twitter: "El cuerpo técnico del Once Caldas seguirá, ya que, además de tener contrato hasta diciembre del 2020, creemos en su proyecto deportivo", dijo Castrillón.

El entrenador cartagenero arrancará para la tercera temporada con el equipo. En la primera, el año pasado, sacó al Blanco de la zona del descenso y lo llevó a la final de la Copa Águila, la que perdió con Atlético Nacional. Y este año quedó eliminado de todos los torneos en los que participó, las dos Ligas, la Copa Águila y la Copa Suramericana.

A pesar de contar con el respaldo de la dirigencia, Bodhert ha perdido credibilidad con los aficionados, lo que lo obligan a corregir o cambiar para evitar otro fracaso.

1. Objetivos claros

El técnico no ha sido claro con el hincha. Antes de empezar la Liga dijo que tenía un equipo que, con tres torneos seguidos, proceso y continuidad, le daba para competir: "Nadie puede garantizar el título al final, pero sí podemos decir que vamos a competir". Después, a mitad de torneo cambió: "Eso es lo que hay", indicó tras un juego; "No podemos ocultar que tenemos una delantera joven".

Y finalmente, el 13 de septiembre, recalcó sobre las diferencias entre los objetivos de los directivos y los de los aficionados: "No hay una sintonía entre el proyecto que tienen los directivos con lo que se quiere como hincha y prensa; todos queremos ganar y ser campeones, pero en Once Caldas hay una intención de fortalecer sus fuerzas básicas y consolidar jugadores”.

El hincha se sintió engañado y reprochó todo lo anterior.

2. Elegir los refuerzos

Ha fallado en la elección de los refuerzos. A mitad de año se fueron Juan Pablo Nieto, Jean Carlos Blanco, Ricardo Steer, José Luis Moreno, Elkin Soto, Edwin Velasco y Bismar Córdoba. Y arribaron José Junior Julio, Edis Ibargüen, Erick Montaño, Adrián Estacio y Enrique Serje. Ninguno marcó diferencia como refuerzo, incluso Montaño no jugó, por eso tuvieron que apelar a los jóvenes provenientes de las divisiones menores.

En el 2004, Luis Fernando Montoya armó el Once Caldas más ganador de su historia sin figuras.

3. Manejo de grupo

David Lemos, quien se lesionó en la final de la Copa Águila el año pasado ante Nacional, era la esperanza goleadora para el semestre que acaba de finalizar para el Blanco. A pesar de haber estado recuperado, apenas jugó 458 minutos y convirtió una anotación. Ante la falta de gol, el entrenador argumentó falta de forma y no le dio la continuidad que requería para volver a su estado habitual.

Se le reprocha que sostuvo 12 partidos en la titular a Kevin Londoño, reincidente en actos contra la disciplina (llegó tarde dos veces a los entrenamientos) y de bajo rendimiento en términos generales.

En ese mismo orden no fue consecuente con Johan Carbonero, figura del equipo al final de la Liga.

El DT, que defendió a Kevin a pesar de su indisciplina, cuestionó a los jóvenes por "agrandados".

Sobre Kevin dijo: "No entiendo el interés y no me parece que tengamos que señalarlo tanto".

4. Juego plano

El equipo, a medida que avanzaron los partidos, se vio limitado en su fútbol y predecible para sus rivales. Se demoró para encontrar el volante recuperador, puso a Juan David Rodríguez en la posición que no era la de él y Javier Reina tardó para subir el rendimiento. Carlos Lizarazo nunca respondió a la expectativas. Por eso el grupo fue por los costados y tiró siempre centros.

Además, también a mitad de torneo dijo que no tenían tiempo para trabajar la pelota quieta. La última vez que hizo un gol de tiro libre fue el 7 de marzo del año pasado con Yesus Cabrera.

Hoy se le pide que sepa elegir los jugadores que le copen los lugares en el campo, que los sepa utilizar y tenga las variables para competir.

5. Aprender a ganar

Un equipo, para alejarse del descenso en Colombia necesita 32 puntos por semestre. El año pasado Bodhert lo logró con el Once Caldas. Sin embargo, a la hora de ganar algo para la historia del Club aún está en deuda; estuvo cerca con la final de la Copa ante Nacional y la perdió.

A la hora jugar algo importante ha perdido en la Liga, la Copa Suramericana y la Copa Águila.

Además, este año, para no dar ventajas, fueron a Ipiales en vuelo chárter, pero se llevaron a los suplentes y perdieron el partido.