El fútbol americano subió las emociones en Carabineros

La cotidianidad de la Escuela de Carabineros Alejandro Gutiérrez se rompió ayer con el fútbol americano, ese deporte famoso en los Estados Unidos, pero poco común en la ciudad.

Al frente estaban los muchachos de Hunters, de Medellín, y Toros de Manizales, quienes tuvieron una motivación especial para jugar el partido, pues después de hacer rifas, fiestas y vender manillas..., estrenaron su indumentaria con la que competirán en la temporada oficial que arranca el próximo 18 de junio, con la participación de ocho equipos de Bogotá, Medellín, Zipaquirá y Manizales.

Resistencia total

Al mediodía de ayer, el ambiente en las gradas de la cancha de Carabineros era especial. Los ánimos aumentaron cuando los visitantes entraron al terreno en medio de humo de colores. Atrás, los 'pelaos' de Toros descargaron su energía con gritos de victoria.

Lo que siguió fue una demostración de resistencia, fuerza y táctica. Los visitantes sacaron a relucir su experiencia y lo cómodos que se sienten jugando con los elementos de protección, mientras que los locales trataron de acomodarse en el campo con sus cascos, pecheras y hombreras...

"Es un cambio total, pues antes no teníamos los elementos de protección y nos confundían con jugadores de rugby. Esto es un esfuerzo propio y de las familias porque no tenemos patrocinio de ningún tipo", dijo el jugador de Toros, Sebastián Valencia.

El Club se conformó legalmente hace tres años. Lo forman especialmente universitarios, quienes se rebuscan los espacios para entrenar. Desde este año, el mexicano Jaime Mejía, quien lleva varios años radicado en la ciudad y practicó este deporte, asumió la dirección técnica y le dio una inyección de motivación a sus integrantes, pues estuvieron a punto de 'tirar la toalla' por la falta de apoyo.

"Quedé satisfecho con lo que hicieron los jugadores, a pesar de que hay que mejorar en los pases y en la resistencia. Hay que entrenar más para tener posibilidades de sobresalir", indicó el entrenador.
Los $4 millones que recogieron los familiares e integrantes de Toros sirvieron para comprar cascos y pecheras para 12 jugadores. La indumentaria la importan desde Estados Unidos, lo que eleva los costos.

Al final, el partido quedó 28-21 a favor de los paisas, pero más allá del resultado en un entrenamiento para la temporada, los muchachos de Toros quisieron llamar la atención con sus uniformes y demostrar que tienen casta para rato.