Ricardo Patiño
LA PATRIA | MANIZALES
Una anécdota marcó la pretemporada de tres jugadores caldenses en el Once Caldas en Rionegro, a comienzos de este año.
El portero Sergio Román y los volantes Santiago Loaiza y Juan José Castaño terminaron con la cabeza rapada en una especie de ritual por ser convocados y entrenar a la par con futbolistas de más experiencia. La ilusión crecía por ser tenidos en cuenta con el grupo profesional y tener la oportunidad en cualquier momento en la Liga Postobón.
Sin embargo, los sueños volvieron a quedar ahí. Anoche, cuando el Once enfrentó al Junior, se completaron 52 fechas consecutivas sin que un jugador caldense juegue, un solo minuto, con el equipo. El último fue Castaño cuando actuó 14 minutos ante Cúcuta, el 23 de abril del año pasado. ¿Qué pasa?
"Es preocupante, pero la ilusión sigue intacta porque estamos cerca del grupo. Trabajamos fuerte para volver a aparecer", dice Castaño, quien hace cuatro años hace fila, a pesar de brillar con la Selección Caldas y en la Copa LA PATRIA.
Cada que arranca la Liga o hay cambio de técnico la pregunta es repetitiva. ¿Cuándo se le dará oportunidad al jugador caldense? "Vamos a procurar estar cerca de las divisiones menores", dijo el técnico Flabio Torres cuando llegó a Manizales. 20 días después el orientador expresó en plena pretemporada: "Me preocupa el nivel de los juveniles, que este año tienen que hacer parte del grupo principal. No encontré un gran nivel en los Sub-20. Hay jugadores con condiciones, pero no los ve uno sobresalientes".
Desgaste de lado y lado
Elkin el Sultán Soto sí tuvo suerte, aunque al principio el DT Javier Álvarez lo borró y lo mandó a jugar en la desaparecida Primera C. Luego lo rescataron Alexis García y el manizaleño Carlos Panelo Valencia.
El volante, que lleva seis años en Alemania, fue el último jugador que salió de la cantera del blanco. Su capacidad técnica y el título nacional en el 2003 y de Copa Libertadores un año después fueron suficientes para ganarse un nombre y dar el salto al exterior.
Otra realidad vive Santiago Loaiza, del barrio La Sultana. El volante, con similares características a las de Soto, admite que este año será crucial para saber qué pasará con su futuro. Ajustó cuatro años en el club y, a pesar de tener minutos en Liga y Copa Postobón, no logró consolidarse con los entrenadores Juan Carlos Osorio, quien lo respaldó, Pompilio Páez, Eduardo Cruz, Ángel Guillermo Hoyos y Santiago Sachi Escobar.
"Por momentos uno se cansa porque se trabaja duro. El profe Osorio me apoyó bastante, pero apenas comenzaba el proceso. Ahora entreno con el equipo Sub-20 y el sueño que tenemos todos es que nos den la confianza en la próxima Copa Postobón. Aún tengo un año de contrato, pero sería bueno saber qué planes tienen con nosotros o de lo contrario mirar otra opción", expresa el futbolista, de 20 años.
Similar situación afronta el villamariano Johan Castaño, quien al ver pocas opciones lo intentó a principio de año en el Deportivo Pereira, pero cuando fue a finales de febrero el técnico le expresó que ya tenía los jugadores. "Son cinco años en el Club y faltan más oportunidades. Lo ideal sería que si nos equivocamos nos siguieran mirando. Los directivos me prometieron un equipo de la B este año para coger más ritmo", indicó el delantero, con minutos en la temporada de Santiago Escobar.
El que sí no ha debutado en la profesional es Jhon Freddy Salazar, que desde los 7 años llegó al Once Caldas. El juvenil surgió del barrio Aranjuez y también hace cola, después de ganar experiencia en el Torneo Nacional Sub-20 y la Copa LA PATRIA. El año pasado, cuando Sachi Escobar le iba a dar la oportunidad, se dieron cuenta de que no estaba inscrito.
"Ojalá algún día termine ese mito para los jugadores de la tierra. Entrenamos, pero tenemos pocas opciones y así es complicado. Esperemos qué pasa este año en la Copa Postobón", señaló el delantero, de 19 años.
Camada desperdiciada
La historia dice que en el 2001, Caldas fue subcampeón nacional juvenil bajo la orientación de Carlos Alberto Panelo Valencia, mientras que en el 2002, el equipo alcanzó la gloria cuando logró el título con el fallecido Javier Suárez, como técnico.
Ese año, jugadores como Sebastián Ramírez, Camilo Hernández, Ramiro Sánchez, Edwin Zapote Muñoz y Carlos Alberto Arias fueron las figuras. Este último integró la nómina campeona del Once Caldas en el 2003, pero con la particularidad de que no actuó un solo minuto.
Hoy aparecen nombres como Sergio Román, Daniel Ramírez, Stiven Alzate, Israel Alba, Santiago Loaiza, Eddy, Juan José y Johan Castaño, además de Freddy Salazar, quienes en teoría podrían asumir la responsabilidad en cualquier instante.
No obstante, el tema va más allá, como lo reconoce el caldense Joaquín Paco Castro, técnico de las divisiones menores del blanco y quien alcanzó a estar con la Selección Colombia que se preparó para los Juegos Olímpicos de Moscú (Rusia) en 1980.
"El jugador caldense tiene condiciones, pero le ha faltado algo en lo técnico o futbolístico porque oportunidades ha tenido. Los han arrimado, pero no han dado la medida. Falta entrega, sacrificio y actitud porque ellos creen que les sobra con lo que tienen. Se volvieron conformistas y no se perfeccionan para que se impongan. Puede que les falte un paso por la B", agrega Paco.
Otra crítica que se hace es que el caldense, a los 17 o 18 años está muy joven para debutar, y a los 20 o 22 años ya es viejo. Por eso muchos, en medio del desconsuelo, cuelgan los guayos.
Humberto Beto Sierra, director de las divisiones menores en el Once, es señalado por parte de la prensa y algunos técnicos aficionados de valorar poco al futbolista del departamento. "No pasa nada. Mire a Santiago Loaiza y a Juan José Castaño. Cuánto más tienen que madurar. Lo otro es que como ellos no tienen representantes o empresarios, pues los borran. Mientras el señor Sierra sea el eslabón para jugar es complicado" enfatizó Gilberto el Fantasma Cardona, quien recuerda que el exdirectivo Jairo Quintero prefería el jugador de otra tierra por encima del nuestro.
Sierra se defiende. "El jugador joven es de proceso y tiempo, no sale por arte de magia o producto de la casualidad. Esto lo hacemos desde el año pasado para volver a construir las bases desde los 13 y 14 años. Hay ejemplos como Israel Alba, Daniel Ramírez, Eddy Castaño y Freddy Salazar, quienes traen un proceso desde el 2008. Esperemos que cuando jueguen puedan responder y se consoliden, pues en un debut pasan muchas cosas de acuerdo con el resultado y el comportamiento del equipo".
Para Sierra también hay que entender que el fútbol es de gustos y lo vivió recientemente con J.J. Castaño, que Sachi no le vio proyección y ahora Torres lo perfecciona. "Hay 120 jugadores en divisiones menores y el 80% son de Caldas. Dicen que los de afuera sí tienen la oportunidad, pero la exigencia es igual para todos".
Esto lo lamenta desde la distancia el manizaleño Ricardo Chicho Pérez, asistente técnico del Boyacá Chicó, quien con el Once Caldas ganó el Nacional de Primera C. En el equipo estaban Dayro Moreno, Alexis Henríquez, Luis Núñez, Edwin Móvil, Diego Amaya y Julián Díaz, entre otros. "Material humano había y mucho porque se hizo una planificación con Herney Duque, el mejor formador que tiene Caldas. Al jugador de la tierra siempre le ha tocado difícil porque hoy en día salen menos que en el pasado. Son muchos los casos y da tristeza que se perdieron para el fútbol profesional, como Andrés Pérez, por nombrar solo un caso", puntualizó Chicho, considerado uno de los mejores volantes de marca del país en su época.
Tocados por el pasado
El chinchinense Cristian Osorio terminó el año pasado como el mejor jugador de la edición XXIII de la Copa LA PATRIA. A los 13 años debutó con Real Monarca y le alcanzó para destacarse en el torneo. Su evolución la ratificó con los dos campeonatos que consiguió con el Once Caldas, equipo con el que jugó en la profesional y le dio la oportunidad de irse al exterior.
Cristian, de 25 años, pasó por El Vigía, de Venezuela, en el que marcó seis goles. También lo intentó en La Paz F.C., de Bolivia, pero no contó con suerte. Fue ahí donde apareció la opción de jugar el año pasado con el Deportivo Pereira, pero terminó contrato por la crisis del conjunto matecaña.
Este volante, de gran capacidad, entrena sin parar en su tierra natal a la espera de que algún club se fije en su talento. Mientras la opción aparece juega un torneo local en el municipio y contabiliza 23 goles en ocho partidos.
Johan Marín sí que puede dar fe de su pasado con el blanco. Quedó campeón en el 2010, pero partió para el Unión Magdalena en busca de mejores posibilidades. "Cada año es lo mismo. En mi época faltó más respaldo y apoyo de los directivos. En el Unión me sentí valorado por encima de futbolistas de allá. Antes jugaba el que tenía talento y ahora se depende de un empresario", resalta Marín, quien mezcla sus estudios de psicología en la Universidad de Manizales en Once Caldas Futsal, equipo que cuenta con Alejandro Arango, Edwin Valencia y Adrián Peláez, también desperdiciados.
A diferencia de antaño donde surgieron referentes en el fútbol caldense como Alonso Pipa Botero, Carlos la Fiera Gutiérrez, Alonso el Pocillo López, Miguel Antonio Rada, William Gómez, solo por nombrar a algunos, hoy en día se quedan estancados y prácticamente se queman esperando la oportunidad. La solicitud para técnicos y directivos es tan recurrente que hasta existen campañas radiales.
Qué dice la prensa
¿Por qué el jugador de esta tierra no se consolida con el Once Caldas?
Rubén Darío Mondragón, Angular Deportes
A los jugadores de otros departamentos los consienten bastante en el Once, a diferencia de los caldenses, quienes escasamente entrenan. Los que han arrimado no han tenido la calidad suficiente.
Juliana Salazar, Caracol Radio
Las condiciones están, pero se necesita una estructura en las divisiones menores. Además, al jugador le falta sacrificio y actitud para creer en sus capacidades.
Rusbelt Franco, Carrusel Deportivo
Falta de oportunidad de los técnicos y ambición de jugadores porque si acá no es deben buscar otras posibilidades.
Martín Alonso Henao, Tarantela Deportiva
Se necesitan oportunidades. Lo otro es que hoy en día en el fútbol son más importantes los empresarios que el talento.
Olmedo Correa, Todelar
Históricamente el jugador de Caldas ha sido menospreciado por los dirigentes y los derechos deportivos también tienen que ver porque padres de familia y directivos siempre han querido sacar provecho y el que pierde es el futbolista.
La voz del técnico
"Condiciones sí las tienen, eso es lo que he visto en los trabajos, lo que pasa es que hay que llevarlos muy bien. En su momento tendrán la posibilidad de jugar, como en la Copa Postobón", expresó el técnico del Once Caldas, José Flabio Torres.
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