Una profe comprometida con el planeta trabaja en la Normal de Anserma

MARTA TERESA VELÁSQUEZ

LA PATRIA / ANSERMA

La ansermeña Isabel Vélez Bolívar no olvida las frases que sus padres Pedro de Jesús y María Elicenia le decían: "lucha para salir adelante", "piensa siempre en el futuro y serás una gran persona" y "estudia y serás alguien en la vida". Estas se convirtieron en su modelo de vida.

La primaria la cursó en la institución Celmira Piedrahita (Anserma) y la secundaria en el plantel que hoy se desempeña como docente: la Escuela Normal, pues desde muy pequeña descubrió su vocación por la enseñanza.

Como buena maestra aprovechó que al municipio llegó una sede de la Universidad del Quindío y allí se formó como licenciada, además realizó una especialización en convenio con la Universidad Católica de Manizales.

Poco a poco

Recuerda que recién nombrada como profesora decidió ir a conocer el primer lugar donde enseñaría. “Era muy lejano. Reunieron a toda la gente y equiparon el salón de clases, pero nunca volví, porque cuando me iba a posesionar me nombraron en la escuela de la vereda San Pedro, en donde estuve 11 años”.

Posteriormente a San Pedro, Isabel trabajó en la Escuela Anexa, que más adelante se fusionó con la Normal. En este lugar suma 20 años de experiencia más enseñándoles a niños del grado preescolar.

"La docencia se pule con la experiencia", dice. Sus allegados, colegas y estudiantes la describen como una mujer comprometida, entregada y abnegada.

Su otra pasión

Durante su labor se ha vinculado a proyectos que promueven el cuidado y conservación del medio ambiente. Ha elaborado basureros con material reciclado y actualmente rellena con basura botellas plásticas que utilizará como cerca de los árboles que ha sembrado. También adecuó un jardín en la sede primaria y constantemente habla y enseña a sus escolares pautas sobre ecología.

Con Isabel

Su niñez: Cuando pequeña jugaba a la maestra y le enseñaba a los niños de su barrio.

Su personalidad: Es callada, tímida y con gran sentido humanitario. "No me gusta tener problemas con nadie”.

Ecologista: Aboga por la conservación y cuidado del medio ambiente. Se caracteriza por sembrar en bolsas, trasplantarlas a terrenos firmes y cuidar sus plantas, incluso, en horas extras.

“La Normal se ve más bonita con las plantas que ella siembra”, cuentan algunos de sus chicos. Conoce con exactitud el tiempo lunar en el que se deben sembrar las matas y siempre se le ve buscando el sitio adecuado para exhibirlas.

Cuando se pensione: Montará un invernadero. “Me duele ver cómo muchos jóvenes no cuidan el medio ambiente”.

La pone de mal humor: Sentirse incapaz de realizar algo y no poder presentar las cosas a tiempo.

Una sonrisa: Aunque tiene cara de seria, la pone feliz compartir con su familia, amigos y compañeros de trabajo.

Plato preferido: Chuletas, ensaladas, y postres.

En su tiempo libre: Camina, ve televisión, toma tinto, charla y trata de arreglar el mundo.

La Escuela Normal: Significa crecimiento personal, compartir y aprender a ser mejor persona y maestra.

Frases que la reconocen: "Cuidemos el medio ambiente, no lo acabemos".

Reconocimientos: Ha sido reconocida en dos ocasiones como la mejor docente de la institución por su afán de concienciar a los escolares sobre el cuidado del medio ambiente.

Su mejor amigo: No tengo uno solo. Para mi es aquel que comparte todo lo bueno; es sincero, firme y me invita a hacer cosas buenas.

Un mensaje para quienes quieren ser maestros: Se debe tener mucha vocación.