¿Será verdad tanta belleza?

¿ SERA VERDAD, TANTA BELLEZA ?

La Red de Ciudades Cómo Vamos divulgó una encuesta en la cual posiciona a la ciudad de Manizales en un puesto privilegiado en relación con otras ciudades colombianas. Lo que no debemos perder de vista, es que las encuestas tienen, al igual que los políticos, un porcentaje muy bajo de credibilidad.  

Quienes vivimos en la ciudad y somos apenas ciudadanos inquietos, nos planteamos interrogantes que ameritan algún discernimiento intelectual. Lo formal, a veces oculta lo fundamental. Démosle un vistazo a los interrogantes.

“¿ SE SIENTE ORGULLOSO O MUY ORGULLOSO DE SU CIUDAD ? “

Es un interrogante tan elemental que se responde solo. Todos en términos generales , casi sin excepción, tenemos un afecto natural por el lugar donde nacimos, donde vivimos, sin recurrir a planteamientos sentimentales, afectivos, emotivos, filosóficos, sociológicos.

La  respuesta debería ser de un l00% de positividad. “ Ayyy…que orgulloso me siento de haber nacido en mi pueblo “ . Prevalece el sentimiento de pertenencia, que es innato.  

“¿ SE SIENTEN SATISFECHOS CON SU CIUDAD COMO UN LUGAR ( ? ) PARA VIVIR “ ? ¿  A qué tipo de lugar se refieren ?

La primera y segunda, son dos preguntas insustanciales, triviales, elementales, coligadas que no exigen razonamientos, ni el uso de la dialéctica, apenas sì, la lógica elemental del pueblo. Son dos preguntas envueltas en el mismo fardo, al destapar la una, queda al descubierto la otra, ya que existen factores intrínsecos y unívocos que generan respuestas yuxtapuestas, es  decir de tipo afectivo y emotivo, las cuales no  aportan más allá de conceptos que no influyen mucho en calidad de vida como tal. Existen comunidades que se debaten en la miseria y aman entrañablemente a su terruño como algo inherente a  su existencia.      

Cuando la encuesta, explora temas más de la intimidad referentes a las “ afugias” del diario vivir, específicamente la situación económica, ahì aparece el desplome y las falencias son superevidentes, por no ser del abstracto humano, sino de sus propias experiencias como vivencias cotidianas .Tenemos que ver el panorama en blanco y negro, como son las situaciones reales. No podemos negar que el desempleo de nuestra ciudad no es el que eufemísticamente da a conocer el DANE. Quienes nos damos el lujo de caminar por nuestra ciudad, la vemos atiborrada de gente en horario laboral, los cafés  llenos de personas jugando billar o ingiriendo licor, los parques llenos de ociosos, profesionales desocupados o convertidos en negociantes por fuerza de la necesidad, familias emigrando a pesar de querer a su ciudad buscando otros horizontes.  Quienes tenemos la oportunidad de caminar por nuestra bella ciudad, somos testigos de la cantidad de negocios que aparecen todos los días en sectores donde no se necesitan, sin planificación, sin estudio de mercadeo, sin capacidad competitiva,  motivados exclusivamente por una necesidad de sobrevivencia hasta que mueren por culpa de  los altos impuestos y cargas impositivas. ¿ Y, qué decir de los vendedores ambulantes ? Simplemente, es una tragedia. Talvez lo único bueno fue que este problema social, dio para dar trabajo, aunque sea de mala calidad, a unos cuantos señores que dicen ser defensores del espacio público para matonear a los  mismos de su propia clase en nombre del gobierno y del orden.  

La inseguridad, es un fenómeno que existe, somos  víctimas de ella , pero muy poco se sabe estadísticamente porque los ciudadanos no denunciamos ¿ Para qué ?. Nadie cree en la justicia. Cuando nos hurtan un celular, es más fácil reponerlo y listo, por lo menos no queda uno con enemigos a la vista, ya que nuestra ciudad es tan pequeña que volver a encontrarnos con los cacos, es cuestión de todos los días. Los drogadictos, mendigos, lustrabotas,loteros,vendedores de baratijas, chucherías, minutos, artículos robados, niñas ofreciendo sexo, invaden nuestra ciudad. Los mascoteros, se tomaron las zonas verdes, los andenes, las calles, espacios para recrear a los niños y el caquero nos alejó  sin que nadie ponga orden.  

En cuanto a la gestión de los señores Alcaldes, quienes no tenemos intereses políticos y sabemos medianamente como funciona  la administración, generalmente entramos en un adormecimiento, hibernación o anestesia, por que, si opinamos, ¿ quién nos oye ?  

No hay participación del pueblo en la toma de decisiones. Elegimos a nuestros Honorables  Concejales y a nuestro Alcalde democrà……( ? ) y de ahí para allá,

“ nanay cucas “, como dice el dicho. No existen mecanismos de evaluación confiables, ni  válidos, ni creíbles, ni abiertos a la opinión para poder acceder a ellos y ahí sì, con

resultados ajustados a matemáticas, aplicar un % de desempeño eficiente y eficaz.    

En resumen, las ciudades y lugares donde vivimos, son amables para todos desde lo afectivo, pero otra cosa muy diferente es la calidad de vida que depende de circunstancias muy particulares y que sería  un error estandarizarlos.

Manizales, es una ciudad encantadora, llena de embrujos y de paisajes, con gente laboriosa, luchadora y pujante en todos los estratos sociales, pero,… dejémoslo para otro artículo más en detalle.