Detrás de los ciberataques en cadena que se dieron por el ransomware 'Wanna Cry', que causó grandes pérdidas económicas en todo el mundo durante los últimos días, está la moneda digital Bitcoin como divisa de cambio para liberar la información secuestrada por los cibercriminales.
El Bitcoin al ser una criptomoneda, que no está sujeta a un Emisor ni está respaldada por ningún Gobierno, es difícilmente rastreable al no pasar por los bancos ni por ninguna entidad.
El coronel Fredy Bautista, Director del Centro Cibernético de la Dijin, asegura que la utilización de la moneda digital no está asociada directamente al uso delicuencial. “No estamos criminalizando el uso Bitcoin, ni más faltaba, la criptodivisa es la más utilizada porque es la más popular y los criminales así lo entienden”, explicó el oficial.
“Hay países donde es legal y en otros como Colombia donde no está regularizada, pero también vienen siendo utilizados en otro tipo transacciones muy distintas al secuestro de información”, agregó Bautista.
Sin embargo, el Coronel da cuenta de que sus características facilitan que los cibercriminales realicen sus operaciones por la dificultad en el rastreo, ya que, estas transacciones no se hacen sobre los sistemas financieros de los países, sino a través de plataformas propiamente desarrolladas por las personas que montan los negocios de bitcoins de manera legal.
“Los criminales saben que vincular un secuestro de información sensible más un pago con Bitcoins les permite anonimato, que es lo que están buscando”, agregó.
Y aunque hoy en Japón se aceptan los Bitcoins como medio de pago, en Colombia la Superintendencia Financiera se pronunció sobre el tema en el 2014 y determinó que no era una moneda legal dentro del país.
El Banco de la República explicó que el Bitcoin no es un activo que tenga equivalencia a la moneda legal al no haber sido reconocida en el país”.
De acuerdo con la Superintendencia, el uso de la moneda virtual se puede prestar para adelantar actividades ilícitas o fraudulentas, incluso para captaciones ilegales de recursos, lavado de dinero y financiación del terrorismo.
Los compradores y vendedores de la divisa se exponen a riesgos operativos y a que sus billeteras virtuales sean hackeadas y robadas, estas personas no están amparadas por ningún tipo de garantía privada o estatal, advirtió la entidad.
Según las autoridades, hoy son varios los países que han reconocido la importancia de esta moneda en el comercio electrónico que hasta han puesto cajeros electrónicos que convierten los Bitcoins en Euros (España, calle Serrano), lo que es cierto es que esta moneda necesita una pronta regulación que permita a los usuarios plena seguridad sobre sus inversiones y compras.
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