LA PATRIA | MANIZALES
Un televisor LCD de 32 pulgadas se convirtió en la pesadilla del mayor Carlos Alberto Marín Gómez, excomandante del Cuerpo de Bomberos de Manizales. El exfuncionario paga actualmente una pena de 37 meses de detención domiciliaria por peculado por apropiación.
El pasado miércoles, el Juzgado Tercero Penal del Circuito le dictó sentido de fallo condenatorio por fraude procesal y falsedad en documento público, proceso relacionado con el mismo tema. Lo sentenciarían, mínimo, a seis años. Su abogado, Juan Manuel Ríos, dijo que apelará.
La primera condena se dio porque Marín se apropió de manera indebida de un televisor que Almacenes Éxito donó para los bomberos, el 31 de diciembre de 2012, aparato que devolvió a finales de marzo del 2013. La Alcaldía se lo entregó para usarlo en el grupo de socorro, pero él se quedó con el electrodoméstico aduciendo que creía que era un regalo personal por prestar un auditorio.
La pesadilla continúo. Le siguieron otro juicio por fraude procesal y falsedad en documento público, por supuestamente presentar unos papeles alterados ante el proceso disciplinario que le llevaban en la Alcaldía por el televisor y que terminó en su destitución, por considerarse una falta gravísima. Y hay más. Enfrenta otro por peculado culposo, ante la supuesta desaparición de un cardiógrafo de la sede Bomberos.
18 años estuvo como comandante de Bomberos.
En julio del 2009, a Marín lo absolvió la Corte Suprema de Justicia del delito de peculado por uso, por el que fue condenado en primera y segunda instancia.
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