LA PATRIA | IRRA
La mina de Alejandro, en la vereda El Bohío, de Neira, cerca a Irra (Risaralda), llevaba unos seis días cerrada. Carecía de energía para iluminarse. Lo más delicado era que el agua y los gases acumulados representaban un peligro mortal para quien se metiera a explotarla.
Eso lo sabía Alejandro Ladino Durán, de 36 años, su dueño. Por eso, ayer, a las 10:00 de la mañana, cuando los hermanos César Augusto y Arles de Jesús Vinasco García le dijeron que se meterían, les pidió que no lo hicieran. Pudo más la ambición.
Los jóvenes, de 23 y 20 años, no habían descendido un metro de profundidad en la mina, y ya la fuerte inhalación de gases les provocó lo que se conoce como la muerte dulce.
Según William Lozano, líder del punto de apoyo de Marmato de la Agencia Nacional Minera, “el límite de oxígeno adecuado es del 19 por ciento, y la mina de Alejandro solo tenía 6,7 por ciento”.
Ladino Durán notó que los muchachos se demoraban para salir. Por eso bajó unos 30 metros, desde su casa hasta la mina, para saber qué les había pasado. Al llegar y mirar al fondo de los socavones, vio los cuerpos inertes de los hermanos Vinasco Guzmán.
Alarmado, se metió a la mina para intentar auxiliarlos, pero la tragedia se acrecentó. Los gases le provocaron una muerte inmediata. Carlos Ramírez, mayordomo de la casa de Alejandro, se percató de la tragedia y pidió ayuda a los trabajadores de las minas vecinas.
Entre todos amarraron los cadáveres con lazos y los montaron en brujas (carros de rodillos adheridos a una moto) que, a su vez, están adaptadas a la vía del antiguo ferrocarril y que los mineros usan como transporte rudimentario para llegar a las minas.
25 minutos duró el trayecto hasta el casco urbano de Irra y otros cinco minutos de ahí hasta la morgue del Hospital Santa Teresita de ese corregimiento risaraldense. La noticia de la muerte de los dos mineros y del dueño de la mina corrió por todo Irra y llegó hasta la vereda Sardinero (Quinchía), donde vivían los dos hermanos.
Allí se enteró Mauricio Tapasco, vecino de ellos. Paró la pesca y, acompañado de otros lugareños, quienes hace un año los conocían, fueron hasta el hospital de Irra.
Lo mismo hizo Wálter de Jesús Vinasco, padre de los hermanos. Frenó sus labores de arriero cuando lo llamaron para darle la peor noticia de su vida: sus dos hijos ya no existían. Afuera del Hospital Santa Teresita, de Irra, ya se sentía el luto.
Las caras tristes de Tapasco y sus amigos, así como el llanto incesante de Vinasco, eran suficientes para entender que los primeros no volverían a ver a sus vecinos y, el segundo, a sus hijos.
Los hermanos Vinasco García eran naturales de Bonafont (Riosucio). De allí se habían trasteado hace un año para la vereda Sardinero, de Quinchía (Risaralda). Después de las 2:30 de la tarde, sus cuerpos fueron trasladados a la morgue de Manizales. El dueño de la mina vivía en la vereda Tapias, de Neira.
*29 de enero: Iván Antonio Ojeda Bustamante, de 26 años y oriundo de La Merced, murió aplastado por una piedra en la mina San José.
*17 de febrero: Francisco Javier Montoya Taborda, de 38 años, y Carlos Sánchez Ocampo, de 28 años, murieron en una explosión en el molino La Esperanza 1, de la mina Las Cañas, de la vereda Echandía (Marmato). Hubo cinco heridos.
*9 de marzo: En la mina El Ceibal, sector Villonza, se accidentó José Daniel Díaz, después de quemar 26 tiros de dinamita. Murió en Manizales al día siguiente.
*17 de marzo: Hélmer Daniel Guevara Hernández, de 34 años, nacido en Riosucio. El hecho que le costó la vida se produjo en la mina Villonza, zona alta de Marmato.
*15 de abril: Alfadis de Jesús Ortiz, de 37 años, muere en la mina Villonza. Oriundo de Caramanta (Antioquia).
*27 de abril: Falleció el operario Luis Enrique Velásquez, de 40 años. Él conducía una máquina Dumper que se volteó y le cayó encima.
*6 de mayo: Carlos Ocampo, natural de la vereda Guascal (Supía), en la mina La Socorro. El accidente, al parecer, se produjo porque los mineros hicieron sus necesidades dentro del socavón, por lo que se acumularon gases tóxicos.
*16 de junio: A Elkin Arvey Salazar Puerta, de 26 años, lo mataron unas rocas de la mina Caliche, en el sector La Plaza, en la parte alta de Marmato.
*Septiembre 2: Juan David Betancourt Giraldo, de 29 años, y Fabio Nelson Parra, de 30 años.
*Septiembre 15: Dailer Mauricio Anaya Bermúdez, de 30 años, en la mina Villonza.
El 13 de mayo, 15 mineros fallecieron ahogados en una mina de la vereda El Playón, de Riosucio: Santiago Jagua, de 21 años; Jhon Fredy Jiménez, de 38; Santiago Aricapa, de 19; Alexánder García, de 29; Jhon Alejandro Hernández Chiquito, de 21; José Rubiel Hernández Chiquito, de 25; Wilson Enrique Tapasco, de 42; Víctor Alfonso Flórez Soto, de 30; Gilner de Jesús Pérez Clavijo, de 26; Oliden de Jesús Hernández Reyes, de 50; Rubén Darío Ruiz Arango, de 30; Adrián Arley León Uchima, de 35; Lisandro Basto Guerra, de 32; Libardo Emilio Molina, de 44 y Luis Alfonso Acevedo Londoño, de 45.
*Octubre 8 (ayer). Alejandro Ladino, de 36 años; César Augusto y Arles de Jesús Vinasco García, de 23 y 20 años.
El 22 de noviembre del 2001, a las 5:45 de la mañana, en la vía que de La Felisa conduce a Irra, al otro lado del río Cauca, murieron 53 personas, tapadas por un alud de tierra en la mina Pescadero (Filadelfia).
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