Noticias de Manizales y Caldas,
Abril 29 2024
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Juan Agustín Patiño Jaramillo.
La familia Patiño Jaramillo tuvo una triste Navidad. José Ómar Patiño murió el pasado 16 de diciembre esperando los restos de su hijo, el soldado Juan Agustín Patiño Jaramillo, de 35 años.
El cadáver del militar estuvo hasta el 20 de diciembre en un camposanto chocoano. El lunes pasado a la medianoche lo llevaron a Neira, su tierra natal. El martes, en víspera de Navidad, lo sepultaron al lado de su papá.
Permaneció tres meses desaparecido. Su cadáver lo hallaron el 25 de septiembre en un río de Tadó (Chocó), pero por su estado de descomposición no se supo que era él. Desapareció el 13 del mismo mes, cuando salió a comprar alimentos.
El 13 de diciembre pasado los padres del militar, adscrito al Batallón San Mateo de Pereira (Risaralda) supieron que los restos, hallados a orillas del río San Juan, pertenecían a Juan Agustín. La identificación fue posible por pruebas de ADN.
La odisea
María Esneda Jaramillo, madre del uniformado, contó que la noticia fue un golpe emocional muy duro para su esposo y su salud comenzó a deteriorarse. En los últimos instantes de vida José Ómar pidió que hicieran lo posible por traer a su hijo y que los enterraran juntos.
La esposa del militar y dos parientes del soldado viajaron el 20 de diciembre al batallón San Mateo en Pereira, de donde saldrían rumbo a Tadó para la exhumación de Juan Agustín.
Sin embargo, en el Batallón les dijeron que no tendrían que viajar porque el médico legista enviaba los restos por la funeraria Santísima Trinidad.
Hacia el Chocó
Al día siguiente un oficial encargado de brindarles información les dijo que alguien tenía que viajar, pero que no les prestaban ninguna seguridad.
Con $100 mil entre los bolsillos los tres salieron para el Chocó. A las 3:00 de la mañana llegaron a un puesto de Policía de Tadó y allí durmieron. A las 8:00 a.m. llegaron a cumplir la cita con el médico legista, pero este nunca llegó. Tampoco contestó su celular.
Al comunicarse de nuevo con el oficial en el Batallón, les dijo que dejaran descansar al legista, porque había tenido mucho trabajo. Indignados se fueron hasta Istmina (Chocó) en su búsqueda, pero no estaba.
A los familiares les tocó postergar la diligencia un día más y llamar a Neira para que les mandaran dinero con el fin de pasar la noche.
En casa
El 22 de diciembre apareció el médico, quien una vez entregó los restos les pidió $40 mil para la gasolina. Luego los familiares sacaron lo que quedó de Juan Agustín y lavaron los restos óseos en un río.
Una vez más llamaron al Batallón a ver si los traían de regreso en helicóptero o por tierra, pero nadie les contestó.
Después de un largo viaje llegaron a Neira en un carro fúnebre. El 24 de diciembre realizaron las exequias. Esperaban que la institución, a la que el soldado dedicó 17 años de su vida, le rindiera un homenaje. Allí solo llegaron dos soldados para cargar el ataúd.
¿Quién era?
El soldado profesional Juan Agustín Patiño, de 35 años, era casado y tenía dos hijos. Era el menor de siete hermanos, le faltaban cuatro años para jubilarse.
El dato
Aún se desconocen las causas de la muerte del soldado profesional Juan Agustín Patiño.
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