Óscar Veiman Mejía
LA PATRIA I Manizales
En el Hospital San Simón, de Victoria, en el oriente de Caldas, ven a Nubia Pérez como una experta en el trato con las gestantes y maternas. Son 26 años de experiencia en atención en salud en su pueblo. Ella pertenece al grupo Abuelas amigas de la lactancia.
Hablar con Nubia es acudir a una clase de los beneficios de la leche materna para los bebés. De manera pausada desgrana sus conocimientos: "1. Los niños son más sanos, pues es un alimento con los nutrientes necesarios. 2. Es más económico porque la familia no tiene que comprar leches formuladas. Y 3. Aporta a la unidad del hogar, ya que todos estarán felices de ver a una mamita tan comprometida con su hijo".
La Red de Abuelas de la Lactancia en el departamento (se ha llegado a tener 20 grupos) forma parte de las acciones con las que la Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC) fomenta la leche materna como el alimento más importante en el desarrollo de los niños.
En la práctica lo que hacen las señoras es brindar acompañamiento. "Lo hacemos, más que todo, con mujeres jóvenes, que por diversos mitos y falsas creencias temen a la lactancia", añade Nubia.
La señora ha encontrado embarazadas que temen amamantar a sus hijos porque aseguran que los senos se les caerán y se desmejora su apariencia física. Ahí entra ella: "Les digo, por ejemplo, que los temores son normales, y que hay sacrificios que serán recompensados por el amor tan grande que genera una nueva vida, que depende totalmente de nosotros".
Diana Milena Bedoya es madre de un niño y de una niña. A Ella la orientó Nubia en su proceso materno y de lactante, sobre todo con la pequeña. "Mi testimonio lo baso, inicialmente, con algo muy diciente sobre la lactancia exclusiva hasta los seis meses: mi niña nunca se enfermó y estuvo muy bien nutrida. Cuando empecé con la complementaria al poco tiempo le dio una gripita".
Foto I Tomada del Facebook del Hospital San Simón I LA PATRIA
El Hospital San Simón, de Victoria (Caldas) ofrece capacitación constante a las Abuelas amigas de la lactancia.
La misión
La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja la lactancia materna exclusiva los primeros seis meses de vida y luego mantenerla durante mínimo dos años con una alimentación complementaria adecuada.
Francia Elena Muñoz es la coordinadora de Salud Pública del Hospital San Simón. Comenta que el programa con las abuelas surgió porque estas mujeres tienen autoridad, es decir voz y voto en sus casas. "Eso puede llevar a que las madres jóvenes sigan los consejos de ellas sobre lactancia adecuada".
Añade que al centro asistencial le han preocupado creencias como que la leche de tarro y que la tinta de frijol son buenas para la madre lactante. "Nos interesa promover prácticas reales y efectivas".
Por eso en el Hospital, indica Francia, es normal que los partos cuenten con la presencia de las Abuelas amigas a la lactancia. El propósito es impulsar pautas que eviten que sufran el bebé y la madre. "Por ejemplo, con instrucciones sobre posiciones adecuadas en el momento del amamantamiento, que afiancen el vínculo afectivo".
Diana Milena, la madre de los dos menores, añade que su hija tiene cuatro años y que ella la alimentó con leche materna, además de la complementaria, hasta los cuatro años. "Realmente mi hija es muy sana".
Mejoría
Esta estrategia, junto con otras de prevención y promoción, ya dan sus resultados en Caldas. Daniela Blandón, jefe de la Dimensión de Seguridad Alimentaria y Nutricional de la DTSC asegura que en el 2020 la lactancia exclusiva, o sea bebés amamantados hasta los seis meses solo con leche materna, estaba en el 40%, este año va en el 49%.
De todas maneras, Luis Eduardo Céspedes, director del Instituto de Bienestar Familiar (ICBF) regional Caldas, considera que las cifras aún preocupan. "Estamos mal, no hemos podido consolidar la mínima edad para la lactancia, estamos todavía por debajo".
La pregunta para Céspedes ante la situación: ¿Qué hace el ICBF para contrarrestar esta situación?. La respuesta del funcionario: "promocionamos la lactancia desde todos los programas de atención que tenemos, sobre todo a gestantes y lactantes. Además, creación de espacios como los lactarios en nuestros Centros de Desarrollo Integral (CDI) y en otros para incentivarlas".
Claves
Nubia, para adelantar su labor, ha recibido capacitación en acompañamiento de madres lactantes, en extracción de la leche y en algo que considera clave: cómo solucionar problemas. "Al ayudar se genera bienestar y a la vez aprendo más".
Las Abuelas amigas de la lactancia son cruciales, añade Blandón, en la lucha contra la desnutrición aguda, sea moderada o severa. La funcionaria expone más cifras sobre los resultados: "En Caldas la aguda está en 1,39%, eso significa unos dos puntos porcentuales mejor que la media nacional que es de 1,6%".
Nubia es la madre de Natalia Camacho y abuela de Simón Moreno, de cuatro años. "Me fue muy bien con el proceso de lactancia que mi hija hizo con su bebé, realmente se siente uno muy bien".
En la actualidad está asignada al laboratorio del Hospital San Simón y cada vez que la requieren en maternidad ella está disponible para brindar su experiencia en lactancia. Acompañamiento, amor, nutrición son palabras que ella considera vitales para poner en práctica e inculcar en las madres.
Esos mismos términos los incluye Diana Pineda, líder de Inversión Social de la Fundación Éxito. "Las madres con educación saben que su propio alimento es amor, medicina, vacuna y alimento. Que solo necesitan amamantar a sus bebés para protegerlos y nutrirlos en los primeros seis meses de vida, sin nada más (lactancia exclusiva).
La Fundación adelanta en Colombia una lucha ante un dato aterrador: 1 de cada 9 niños o niñas menores de 5 años, tiene desnutrición crónica (aguda). Es decir, que durante largos periodos de tiempo, no ingieren los suficientes nutrientes para que sus cuerpos y sus cerebros crezcan lo esperado para su edad. Su retraso en la talla, afecta el desarrollo de su vida y del país mismo.
La preocupación por esa situación llega a rincones de las regiones. Consuelo Betancurth es de Belalcázar, en el occidente caldense. También es una Abuela amiga de la lactancia. Sintió temor porque el bebé de una niña joven de su municipio sufriera desnutrición. "La ayudé desde que quedó embarazada hasta que tuvo el bebé, vive muy agradecida porque le enseñe a amamantarlo".
Para Nubia, del hospital de Victoria, y Diana del Éxito, la educación de las madres juega un papel clave en la buena nutrición de los bebés. "La falta de educación y la pobreza golpean en esta situación".
Impactos
La misma Fundación expone cifras, tras años de recopilar estudios. Cita al Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) 2020:
*68 de cada 100 bebés que nacen tienen una madre cuyo grado máximo de educación es bachillerato.
*Cerca del 50% de los niños nacen de madres muy jóvenes, máximo 24 años. El 18% tiene como madre a una niña.
Consecuencia: “El coeficiente intelectual de una persona adulta depende de su peso al nacimiento. Uno de cada 10 niños nace con bajo peso.
Pineda, experta de la Fundación Éxito, considera que un trabajo conjunto podría llevar a Colombia a la desnutrición crónica cero en el 2030. Eso, en la práctica, requiere garantizar nutrición adecuada a niños y gestantes, control de crecimiento y desarrollo, acompañar a las mamás en su formación de crianza, entre otras. Hace énfasis en la lactancia.
Comenta: "la leche materna es la primera vacuna en contra de la desnutrición crónica. En Colombia solo el 36% amamanta de manera exclusiva hasta los seis meses".
Recuerda que la lucha es grande, pues las causas de la desnutrición incluyen, principalmente, hambre prolongada, falta de agua potable, falta de saneamiento básico, falta de acceso a servicios de salud, bajo nivel educativo de la madre, desigualdad por ingresos y bajo peso al nacer.
El año pasado, el Gobierno nacional presentó la llamada Gran Alianza por la Nutrición con el Plan decenal de lactancia materna y alimentación complementaria 2021-2030.
Elisa Cadena, subdirectora de Salud Nutricional, Alimentos y Bebidas del Ministerio de Salud, manifestó que el objetivo de esta nueva política pública es "mejorar la práctica de la lactancia materna y la adecuada alimentación complementaria de las niñas y niños en sus primeros mil días de vida".
Las conclusiones quedan en voz de Diana Milena Bedoya, la madre beneficiaria en Victoria de las Abuelas amigas de la lactancia:
*"La leche materna es el alimento principal para un bebé, para su salud y su desarrollo".
*"Si un bebé pide 50 mil veces tetica, hay que darle las 50 mil veces, no importa si toca trasnochar, ese alimento es vital".
*"No hay que creer en los mitos. Por ejemplo, que los senos se caen por amamantar es mentira".
En todos los rincones
Foto I LA PATRIA
Karen Patricia Oviedo se beneficia con los programas de la Fundación Éxito en el barrio El Pozón, de Cartagena. Ella replica en su comunidad la importancia de la lactancia materna.
LA PATRIA, por invitación de la Fundación estuvo en Cartagena, donde pudo conocer una experiencia en el popular barrio El Pozón, en el suroriente de la ciudad, a unos 45 minutos del mar Atlántico. Allí vive Karen Patricia Oviedo con sus tres hijos.
La madre hace una corta radiografía del sector, fundado en 1969 por campesinos que se asentaron inicialmente de manera informal. "Ya hay zonas con acueducto y electricidad, y con calles pavimentadas, otras no. Esto era inseguro, era feo, eso se ha superado mucho, lo de las pandillas. Y claro, hay desnutrición. Gracias a las fundaciones las cosas han mejorado".
Ella, sentada en una silla de la sede de la Fundación Social para el Desarrollo del Pozón, cuenta: "Por acá hay muchos niños de bajo peso al nacer y talla baja. En mi tercer embarazo me detectaron presión arterial. Entré a la Fundación y a los 15 días ya estaban suministrando un mercado nutricional para mí y para la bebé".
El viento pasa y levanta el polvo de la vía destapada que pasa por el frente de la Fundación en el Pozón. La mujer suelta a su hija, por un momento, para explicar: "Nos ofrecen capacitaciones que sirven para la vida. Y recalcan en un mensaje muy importante: "no le den tetero al bebé, solo seno. Por eso, cada mes la Fundación Éxito nos suministra un mercado con una minuta específica de nutrientes. Mi hija lo recibió hasta los dos años".
Neydis Escobar, de la Fundación Social por El Pozón, indica que su misión es prevenir la desnutrición crónica en niños y niñas menores de dos años, trabajamos en los que son primeros mil días del niño.
Cuenta que en la actualidad benefician a 320 niños y a 314 familias. Cada mes reciben de 20 a 25 madres nuevas, salen cuando los bebés cumplen los dos años.
Añade: "Brindamos capacitación con talleres de manualidades, desarrollo personal y nutrición con el propósito de que las familias tengan un cambio de vida saludable para que les den un bienestar a sus hijos e hijas".
La Fundación Éxito basa su labor en cifras como las siguientes:
*Según la Encuesta Nacional de Situación Nutricional del 2015 (ENSIN), en el país la prevalencia de Desnutrición Crónica o retraso en la talla (DNC) en menores de 5 años es de 10,8%.
*Para los hijos nacidos de una madre con bajo nivel educativo la cifra se duplica (20,6%) y para los hijos de madres indígenas, casi que se triplica la media nacional (29,6%).
*Existen 6 veces más posibilidades de que un niño, hijo de una mujer no educada, sufra Desnutrición Crónica, relación a los niños, hijos de madres con un nivel educativo mayor a secundaria.
*En Colombia los niños y niñas son 13 veces más pobres que los adultos. DANE 2020
*El 15% de los hogares en el país no cuentan con servicio de agua potable.
*10,8 de los niños padece Desnutrición Crónica. En las zonas rurales aumenta al 15,4%; en los indígenas, al 29,6%, y entre los más pobres al 14,2%.
Mitos y realidades
Laura Cecilia Moreno Acosta, nutricionista-dietista de la Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC), explicó:
Foto I Tomada de Freepik I LA PATRIA
Mito 1
Agüita de frijol
Esto es muy cultural de nuestra región. Cuidar el estómago del recién nacido con agüita de frijol. Se cree que cura el estómago para que el bebé crezca sano y fuerte y que no tenga diarrea.
Realidad
Es una práctica cultural que no está científicamente demostrada. Además, va en contra de la lactancia exclusiva que va hasta los seis meses. Generalmente esa agüita de frijol se la dan al bebé antes de los seis y el bebé lo único que necesita es materna. Luego de los seis meses empezamos a dar otros alimentos introduciendo uno a uno, cada día un alimento nuevo. No hay necesidad de curar el estómago con agua de frijol. La leche materna es la que ayuda a que el intestino cree todas sus encimas digestivas para la alimentación complementaria.
Mito 2
Que la madre no puede comer ciertos alimentos cuando está lactando, por ejemplo, helado, ají, cosas muy grasosas.
Realidad
No es tan cierto en la medida que no afecta en la lactancia. Los alimentos van a un proceso de digestión y no van derecho de la boca al pecho de la mamá. Es cierto, si la madre está con sobrepeso que no debe comer ciertos alimentos, pero no es cierto que afecte la lactancia. Ella puede tener una alimentación saludable, completa, equilibrada y no le va a hacer ningún daño con cosas frías o picantes al bebé.
Mito 3
Que la leche materna después de los 12 meses de edad no alimenta.
Realidad
La leche materna continúa siendo importante, aporta todavía 40% de calorías y nutrientes, pero debemos vigilar que el niño además de la leche materna, después del año, esté consumiendo sus cinco comidas del día. Es decir, las tres principales y un alguito en intermedios que va a garantizarle el crecimiento y desarrollo adecuados. La leche materna puede ir hasta los dos años y un poco más porque aún aporta calorías.
Mito 4
Que las mamás piensan que la leche no es suficiente para el bebé y no le alimenta, que por eso pide de comer a cada rato.
Realidad
La razón por la que el bebé pide a cada rato es porque su estómago es pequeñito, con una capacidad de 7, 10 mililitros, eso es muy poquito y los gasta muy rápido. Por eso, requiere tomar leche varias veces al día y en la noche. La leche sigue alimentando, cada madre produce la leche que su bebé necesita y en cantidades y calidad que requiere.
Mito 5
Que para producir más leche debemos consumir Pony Malta, Coca Cola, cerveza, aguas aromáticas, aguas de hinojo.
Realidad
Es falso y mucho más si son bebidas azucaradas y oscuras, que tienen mucha cafeína. La idea es no consumirlas. Podemos tomar aromáticas o jugos naturales, pero es para hidratar a la mamá. No es para producir más leche. La leche se produce entre más succionar el bebé. La mamá si requiere más líquidos para sobrepasar la deshidratación que le puede causar la producción de la leche, pues requiere básicamente un componente de agua de su organismo.
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