MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES
El Pacto Histórico es el nuevo protagonista de la política nacional, y casi todos quieren con él luego del triunfo de Gustavo Petro en la Presidencia. Sin embargo, las profundas divisiones de los partidos y movimientos, tradicionales y alternativos, llevan a que el panorama no esté fácil ni claro para nadie.
Para Caldas, incluso se podría decir que hay fracturas muy fuertes en todas las colectividades, lo que empeora la situación.
El Pacto Histórico en el departamento cuenta con dos representantes electos a la Cámara: Norman David Bañol, del MAIS, por Circunscripción Especial Indígena, y Santiago Osorio Marín, primo del alcalde de Manizales, que llega por la coalición que armaron a último momento con el Partido Verde para las elecciones de marzo y que dejó un sinsabor entre la izquierda.
La voz cantante
Aseguran que fue un error de Bogotá haber dañado la lista cerrada que tenían para Cámara en Caldas, que no incluía a Osorio, y que sin consultarles lo impusieron a través de Camilo Romero, excandidato presidencial del Pacto en representación del Verde.
Adentro dicen que Osorio llegó montado en el aviso del Pacto, pero no lo reconocen como parte de él ni se comporta como alguien de esta colectividad. "Es un experto en tomarse la foto y la selfi. En esta campaña a la Presidencia no aportó nada, no trabajó en equipo, ni sabemos cuántos votos puso", indica un miembro del Pacto Histórico.
Tampoco sienten que el triunfo de Petro haya sido por los votos de Gente en Movimiento, grupo que creó el exsenador del Partido de la U Mauricio Lizcano, y quien fue escogido como miembro del Comité de Empalme del gobierno Petro.
"Lizcano se unió a la campaña 15 días antes de la primera vuelta y tampoco es del Pacto. Tiene su representante electo a la Cámara -Wilder Escobar-, que le da fortín electoral, puso testigos electorales, pero solo le vimos la cara en un acto en Manizales y llevó a Petro a Anserma, aunque esa visita se la pelean entre Osorio y Lizcano. No sentimos que sus votos en Caldas reflejen un triunfo, aún teniendo unas 10 alcaldías; solo ganó en Palestina. La votación de Petro en Caldas fue de opinión, producto del trabajo que hicimos voz a voz, puerta a puerta", expresa el miembro del Pacto.
Tampoco ven impacto en los militantes del Partido Liberal que adhirieron a Petro para la segunda vuelta. "No se reflejaron las adhesiones de los caciques políticos. Para las elecciones del 2023 iríamos fortalecidos como Pacto Histórico, con candidatos y seguros triunfos en Asamblea y concejos, no sé cuántos alcaldes. Para dar los avales la voz cantante la tendrá el Pacto, de lo contrario se generará una crisis. No vamos a aceptar que nos impongan. Muchos llegaron al Pacto pensando en las elecciones del 2023 y aquí los puestos se tienen que ganar", indica.
Lizcano, ficha nacional
Del grupo Gente en Movimiento uno de sus militantes sostiene que independiente de los resultados presidenciales están es uniendo sociedad y que de diferentes sectores saldrán nombres a alcaldías, Gobernación, concejos y Asamblea, y los candidatos serán "concertados con la gente".
A Lizcano lo dan como posible miembro del gobierno Petro, quizá como ministro de TIC, caso en el que Wilder Escobar asumiría el mando de Gente en Movimiento. "Hasta el momento no hay coaliciones definidas, está muy temprano", sostiene este militante.
Otras fuerzas políticas con representación en Caldas aún resuelven cómo van en lo nacional y lo regional. Una es el Nuevo Liberalismo, que logró curul en Cámara de Representantes con Juan Sebastián Gómez, que recogió varias fuerzas. No han definido si serán oposición al gobierno Petro o si se declaran en independencia. Para las regionales estarían en coalición con Colombia Renaciente (santistas) y Dignidad (movimiento de Jorge Robledo).
Sin unidad
La Alianza Social Independiente (ASI), que salió apoyando a Petro para la segunda vuelta, tiene al senador electo Guido Echeverri, exgobernador de Caldas, pero en la región están divididos en tres líneas que parecen agua y aceite: la de Echeverri; la de Orley Trujillo, directivo, y la del concejal de Manizales, Christian Pérez.
Cercanos al exgobernador aseguran que está distanciado de Lizcano, con quien ha sido socio político, y separado del alcalde de Manizales, Carlos Mario Marín. La razón es que Echeverri quiere que el candidato a la Gobernación sea Luis Roberto Rivas, gerente de la Industria Licorera de Caldas, y ahí lo acompaña Gómez; pero Lizcano y los seguidores del alcalde, entre ellos Osorio su primo, buscan que el ungido sea alguien de sus toldas, quizá un miembro del gabinete municipal.
Si bien casi todo el Partido Verde terminó votando por Petro, se desconoce cómo lo hizo la línea de Fajardo, que está en contra de la del alcalde y Osorio. Otro combo aparte es Alexánder Rodríguez, concejal de Manizales; Jéssica Quiroz, diputada, y Hemayr Yepes, exconcejal de Manizales, que terminaron con Gómez, del Nuevo Liberalismo. La fuerza jurídica del Verde la tiene la línea del alcalde y Osorio, por ser los elegidos por votación popular, pero dicen que pocos les están caminando ya.
Afectados
Un golpe fuerte en términos electorales y de militancia recibió el Partido Liberal por la detención del senador caldense Mario Castaño, vinculado como presunto cabecilla de la red delincuencial Las Marionetas, y espera más coletazos que afectarían la representatividad y la credibilidad de los rojos.
"Esto llevó a que el Partido esté fragmentado", sostiene un liberal. Unos votaron con Petro, dicen que los amigos del senador y por eso hay gente muy molesta, y otros con Rodolfo Hernández, entre ellos el representante a la Cámara electo y exalcalde de Manizales José Octavio Cardona, de quien esperan tome las riendas y el liderazgo para preparar al Partido para las elecciones regionales.
Cercanos a Cardona aseguran que quiere que se bajen las aguas turbias, porque hubo mucha confrontación de ambos bandos. Otro brazo liberal es el del representante a la Cámara saliente José Luis Correa, que estuvo desde el inicio de las presidenciales con Petro y no lo volvieron a ver en Caldas.
Señalan que Correa ha chocado demasiado, que no tiene respaldos de diputados, ni de concejales en Manizales, ni de Cardona; tampoco de la línea del alcalde y de Osorio, con quienes aseguran trabajó, pero terminaron distanciados al parecer por ser mal socio. Dicen que Correa podría ser nombrado por Petro en algún cargo nacional, fue el coordinador de Juventud durante su campaña, desde donde podría reencaucharse.
Buscando agruparse
Ómar Yepes, director del Partido Conservador Colombiano, oficializó que no harán parte del gobierno Petro y que deben estar en la oposición. No se sabe esto como juegue para las elecciones regionales, pero lo que buscan los azules en la región es unificar criterios entre el senador risaraldense Samy Merheg y la representante electa a la Cámara por Caldas Juana Carolina Londoño, quienes otorgarían los avales. Para Alcaldía de Manizales y Gobernación de Caldas dependerá de cómo se unen las otras fuerzas políticas.
Pero también quieren escuchar a Yepes y al representante a la Cámara saliente Félix Chica, de quien dicen podría regresar como candidato a la Asamblea. Por su parte el diputado Mauricio Londoño, con otra ala del conservatismo, la que llaman opositora de Londoño, se desconoce cuál será su estrategia con el equipo que ha ido conformando en municipios y si continuarán como conservadores.
Algunos sostienen que ante tanta división política, en Caldas van a salir muchos rodolfos Hernández, motivados por la forma como este excandidato hizo campaña populista y obtuvo un buen número de votos. Sin embargo, como en política los panes se queman en la puerta del horno, todavía hay mucha masa para estirar.
Golpeados
Con sus militancias menguadas terminaron tras las presidenciales los partidos Cambio Radical, Centro Democrático, MIRA y la U en Caldas y dicen que esto se reflejará en las elecciones del próximo año.
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