EFE | LA PATRIA | PASTO
Los moradores de la capital del Putumayo no saben lo que va a pasar con parte de la ciudad. Luego de la catástrofe, muchos han salido de su territorio hasta poblaciones como Puerto Asís, Villa Garzón, y capitales como Neiva y Pasto.
Pero la mayoría está en incertidumbre y deambula por las calles sin rumbo fijo. La noche del sábado algunos durmieron cerca de las casas en ruinas y otros en cercanías al hospital, único sitio donde hay energía proveniente de una planta.
Cerca de 400 socorristas buscan por tierra, agua y aire a un número de indeterminado de desaparecidos en la avalancha de tres ríos que arrasó parte de Mocoa. Pese a que no hay un censo completo de extraviados, las autoridades trabajan en la búsqueda y rescate de personas de quienes sus familiares no tienen noticias, pero que se presume fueron arrastrados por la avalancha, explicó el director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Carlos Iván Márquez, quien cifró el número de heridos en 203.
Carlos Eduardo Valdés, director del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, informó anoche que la entidad ha recibido 248 cuerpos, han efectuado 108 necropsias, con 45 identificaciones plenas por dactiloscopia y han entregado 34 cadáveres, gracias a la participación en las labores de 52 funcionarios entre médicos, odontólogos, antropólogos y personal técnico de rayos X y dactiloscopia.
Durante todo el día hicieron rescates los organismos de socorro pero, siguen apareciendo cadáveres, no solo bajo los escombros, sino en las orillas de los ríos y en cultivos de fincas de los sectores rurales, a donde fueron llevados por la avalancha.
A muchos esta tragedia ha hecho recordar lo que ocurrió en Armero, ciudad que fue borrada del mapa debido a la erupción del Volcán Nevado del Ruiz, con un saldo de 25 mil personas muertas e incluso la llegada de socorristas de diferentes lugares de Colombia.
Moradores de los sectores rurales de Mocoa, como la vereda San José del Pepino, informaron a las autoridades que hay cadáveres hasta en la copa de los árboles.
Bertha Sinsajoa, una moradora, dijo que en la vereda la avalancha alcanzó un poco más de tres metros de altura y que lamentablemente la zona se ha convertido en un cementerio improvisado, puesto que las aguas arrastraron hasta allá varios cadáveres.
El ministro de Salud, Alejandro Gaviria, dijo que con el fin de prevenir epidemias, ante los focos de infección que se están formando en Mocoa, se procederá a una vacunación masiva de la población.
En ese sentido, Gaviria, quien participó de la reunión extraordinaria del gabinete que realizó el presidente, Juan Manuel Santos, en la capital del Putumayo, dijo que expertos del Instituto Nacional de Salud están llevando a cabo un plan de prevención de infecciones, por lo cual se ha dispuesto la remisión de pacientes a Neiva.
Gaviria dijo que visitó el hospital local, para enterarse de las principales necesidades, lo que permitió la llegada en las últimas horas de una carpa hospital, medicamentos, elementos médico-quirúrgicos, como camillas y 5 mil litros de agua. También anunció que se construirá un nuevo hospital departamental para atender a la población.
A través del Fondo de Solidaridad y Garantías (Fosyga) y de las EPS será entregada una indemnización de 18 millones de pesos por cada persona fallecida, la cual incluye un auxilio para los gastos funerarios.
Se indicó por parte del Ministerio de Salud, que este dinero deberá ser reclamado por los familiares, sin ninguna clase de intermediarios, con el apoyo del ministerio y la Superintendencia Nacional de Salud.
Igualmente se indicó que el Fosyga asumirá los gastos de atención de los heridos, lo que incluye la hospitalización, diagnósticos, cirugías que se requieran, material médico quirúrgico, prótesis, medicamentos y el proceso de rehabilitación.
Ancízar Cárdenas Palacio permanece desaparecido en Mocoa. Sus familiares no saben qué ocurrió con él luego de la catástrofe.
El conductor de camión, natural de Salamina y residente en Villamaría, salió el jueves a llevar unos electrodomésticos y realizó la primera entrega en un pueblo cerca del sitio de la tragedia, luego llegó en la tarde del viernes a Mocoa y contactó a un cotero para que el sábado le ayudara a descargar el resto.
Ancízar, de 51 años, se hospedó en un hotel y, según lo que conoció su familia, la creciente arrasó con la edificación. El camión también lo encontraron destruido. La comunicación es escasa, al no tener razón de él y ante la imposibilidad de transportarse vía aérea, tres familiares salieron ayer en un carro particular hacia Mocoa.
Ellos siguen esperanzados en que el conductor aparezca por lo menos entre las personas lesionadas. En su casa lo esperan sus tres hijos y tres nietos.
Ancízar permanece desaparecido desde el día del desastre.
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Estudiantes de Mocoa (Putumayo) que residen en Manizales estuvieron durante el fin de semana recolectando ayudas humanitarias para enviarlas a la capital del Putumayo.
Yéfferson Ortega, estudiante de Ingeniería Agronómica, destacó que su ubicaron en la torre de El Cable durante el fin de semana, pero que seguirán recibiendo ayudas en la universidades de la ciudad.
La Universidad de Caldas también se sumó a esta iniciativa. En un comunicado, indicó que de lunes a viernes recolectarán medicamentos, alimentos no perecederos, ropa y otros elementos que ayuden a superar la situación de emergencia a las familias damnificadas. "Dispondremos estaciones de recolección de ayudas en nuestras sedes, pero al tiempo vamos a seguir estrictamente las indicaciones de quienes tienen la competencia para atender la emergencia", dicen en el comunicado.
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Ramiro Alzate, quien vivió en la vereda Guacas de Pensilvania y que se radicó con su familia hace 20 años en Mocoa, perdió su casa y su negocio. Por fortuna, Alzate había cerrado su establecimiento temprano para irse a compartir en una celebración con sus familiares.
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La ministra de Vivienda, Elsa Noguera, anunció inversiones por 15 mil millones de pesos para la construcción de un acueducto para los habitantes de Mocoa. La funcionaria dijo que este acueducto, que solucionará los problemas de abastecimiento del municipio, estará listo en unos cinco meses.
Destacado
"Estoy profundamente afectado por la tragedia que ha golpeado a Colombia. Rezo por las víctimas, y transmito mi cercanía y la vuestra a cuantos lloran la desaparición de sus queridos y agradezco a todos los que están trabajando para prestar auxilio".
El papa Francisco.
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