La primera construcción que se observa al entrar a Arauca es el hospital San Marcos, una casa que a pesar de no ser moderna, tiene satisfechos a los pacientes. Puertas derruidas por el moho y un vigilante que la tiene con candado es la primera impresión que los visitantes tienen.
El centro de salud ocupa una manzana completa; al frente, está la entrada compuesta por la sala de espera y una pequeña ventana para realizar el pago de las citas. El calor parece ser costumbre y un solo ventilador es lo único que mantiene fresco al lugar. Desde hace un año, el Hospital San Marcos, de Chinchiná, tomó su manejo, debido a que el Santa Ana de Palestina lo liquidaron.
"El mayor problema que encontramos es la infraestructura que requiere remodelarse completamente, también las conexiones eléctricas en Arauca están en muy malas condiciones y cuando hay descargas eléctricas se nos ha quemado la planta", señala Ricardo Campuzano, asesor médico del San Marcos de Chinchiná.
El funcionario sostiene que a pesar de encontrar la construcción en mal estado, iniciaron con algunos trabajos para mejorar la imagen. "Pintamos las paredes, renovamos algunos equipos médicos, dotamos de nuevas camillas y monitores de signos vitales, llevamos el carro de paros cardíacos y tenemos los medicamentos al día", agrega Campuzano.
Contentos
Son pocos los pacientes que se acercan a pedir cita, entre 5 y 10 personas es el máximo que asisten al centro. No les incomoda el calor, están acostumbrados a ello. La gente en general está feliz, porque antes de la nueva administración, dice un habitante, la atención era nula.
A pesar de que las EPS deben $6.000 millones al San Marcos de Chinchiná, y el sostenimiento y la adecuaciones de los hospitales de Palestina y Arauca deban ser operados por ellos, la atención ha mejorado, según las personas del corregimiento.
"Todos los días se reparten 15 fichas para médico general y otras 15 para odontología. Los pacientes ya no tienen que esperar para una cita con un especialista. Ellos llaman y para la misma semana se la asignan", afirma Nataly Pérez, trabajadora social del Hospital San Marcos, Arauca.
En el centro médico se prestan servicios de consulta externa, urgencias 24 horas, tomas de muestras de laboratorio, observación de pacientes y en caso de requerir servicio de radiografías o exámenes especializados, los trasladan en ambulancia hasta Chinchiná. "Nos ha ido bien, tenemos unas encuestas de satisfacción del 96%, creemos que estamos haciendo las cosas correctamente", afirma Campuzano.
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