La Sala de Decisión del Tribunal de lo Contencioso Administrativo de Caldas aplazó el pasado jueves el fallo en el que se conocería si la elección de la personera de Manizales, Tulia Elena Hernández Burbano, es nula, como pretende demostrar el abogado y médico José Norman Salazar González.
El magistrado sustanciador Augusto Morales Valencia indicó que de la audiencia de ese día salieron nuevos elementos para evaluar. “Aunque la Sala había realizado una ponencia con respecto a este proceso electoral, después de escuchar las posiciones y el concepto del Ministerio Público, se decidió que plantearon puntos de sumo interés que ameritan adicionarlos al caso y por lo tanto no fue posible dictar sentencia”, explicó el magistrado.
El procurador judicial, Alberto Hoyos, negó las pretensiones del demandante. Señaló que para el Ministerio Público no se violaron normas y a todos los que participaron en el concurso para elegir personero, que abrió el Concejo de Municipal a finales del año pasado y ejecutó con apoyo de la Universidad de Manizales hasta enero de este año, se les brindaron las mismas oportunidades.
Entre los nuevos elementos aparece el cuestionamiento al convenio que realizó el Concejo con la U. de Manizales, que solo era para acompañar la prueba académica y de conocimientos, no ir más allá como ocurrió, para revisar hojas de vida y datos (ver recuadro).
Por lo tanto, la sentencia y el fallo se podrán emitir, por escrito, en los 30 días siguientes a la audiencia del pasado 21 de julio, pero el magistrado dijo que es posible que lo expidan antes.
El demandante consideró que se está analizando el concurso, no circunstancias que vinieron posteriormente. “Eso no se discute en este proceso”. Sobre la negativa del Ministerio Público, manifestó que no le extrañaba porque desde un primer momento del proceso respalda a la personera.
Argumentos del caso
El demandante dice que en el concurso de elección, al que convocó el Concejo de Manizales y ejecutó con apoyo de la Universidad de Manizales, se cometieron varias irregularidades. Entre ellas, que a la personera, siendo candidata, se le permitió adjuntar el certificado de antecedentes disciplinarios posterior a la fecha, sin modificar las normas; en la entrevista en el Concejo se preguntó por temas jurídicos y no se podía, y le dieron más tiempo para responder en esa parte del proceso y pudo entregar hoja de vida.
La personera sostiene que todo se hizo conforme a las normas y que su elección fue parte de un concurso de méritos.
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