SALOMÉ OROZCO
LA PATRIA | Samaria (Filadelfia)
La cabalgata ha sido una fiesta increíble para mí. He crecido en el ambiente de los caballos, mi abuela fue una amazona, mi papá fue caballista, mi mamá ama los caballos. Y yo voy por el mismo camino.
Hoy quiero contarles detalles de esta actividad que llena de orgullo y alegría a mi pueblo Samaria (corregimiento de Filadelfia). Algunas personas nos contarán cómo viven este festejo cada 20 de julio, Día de la Independencia nacional.
Doña Lucy García conserva su primer recuerdo del certamen. “Hace 36 años, cuando llegué a Samaria, organicé la tercera con la Cabalgata de juzgamiento. En esa época mi hijo empezó a estudiar en el colegio Pío XII. Los padres de familia fueron de gran ayuda, es un recuerdo inolvidable para mí”.
Tengo 12 años y he participado en todas las actividades que tiene la Cabalgata para los niños. Cuando tenía tres años asistí al desfile de caballitos de madera.
He notado que ahora hay más niños que salen al desfile de caballitos, que hacen más actividades, que nos involucran a nosotros los jóvenes, como las carreras de atletismo, la fiesta joven, los concursos, las presentaciones culturales.
Doña Lucy también ha sido testigo de transformaciones. Resalta: “Antes solo se hacía con la gente del pueblo, ahora viene gente de muchos departamentos”.
Fotos | Archivo familiar | LA PATRIA
Samaria es de tradición caballista. El 20 de Julio es su gran fiesta de celebración.
La ruta
Como les dije al principio soy de familia de caballistas. Creo que la Cabalgata del 20 de julio se conserva por esa tradición familiar. En mi caso viene desde mi bisabuela; mi abuela, quien fue amazona; mi papá, y mis tíos. Estos últimos fueron caballistas y, pues, tengo mucho amor por los caballos.
Doña Lucy nos complementa que la Cabalgata continúa con fuerza en el corregimiento porque sus habitantes son amantes de todo lo que tenga que ver con equinos.
En las fiestas he visto que los asistentes disfrutan de muchas actividades como los conciertos de cantantes famosos. Llegan personas de otros municipios a vender comida, viene gente que hace muchos años no venía y se reúne con sus amigos de la infancia. Cabalgan, toman, casi siempre viene gente de otro país.
Don Zeir González es un comerciante de Samaria. El señor comenta: “Es una fecha muy especial para nosotros los comerciantes porque la gente de nuestro pueblo se pone a parrandear (de fiesta y de baile todo el día). Además, llegan muchas personas de varios lugares e hijos del pueblo”.
El señor agrega que son cuatro o cinco días en los que la gente se motiva a salir a la calle y a disfrutar del ambiente sano de los negocios.
Miguel Ángel Osorio, asociado al gremio de caballistas, explicó cómo funciona: “Indudablemente trae un beneficio muy grande para el comercio, se lucra porque las fiestas duran 4 días y la gente disfruta no solamente cabalgando, también en actividades de recreación de festejos, el comercio se vincula con todas sus ventas”.
Al trote
También recuerdo que cuando era pequeña, el 20 de julio la gente venía a guardar sus caballos en nuestras pesebreras y en nuestro potrero, ya que nosotros tenemos una finca muy cerca al parque.
Doña Mónica Castañeda tiene un restaurante. Le pregunté que cómo le iba los 20 de julio. “Ese día vendí carnes, el negocio estuvo bien. Las personas estuvieron satisfechas con las comidas, se sentían cómodas. Llegaron de otras partes y se despidieron muy satisfechos por disfrutar de una buena comida”.
El día que se hace la cabalgata no hay por donde pasar, porque el parque está lleno de caballos, casi siempre se hace un domingo y la gente empieza a tomar y montar caballo desde el viernes. En medio de los adultos, los niños también gozamos con la programación.
Emiliano Orozco tiene siete años. ¿Cómo te sentiste en el desfile de los caballitos de palo?, le pregunté. El niño me respondió: “Sentí mucha pena, me sentí muy tímido al momento de salir a montar el caballo, pero me sentí muy feliz a la vez que estuve montando caballito con mis amiguitos. Estuve muy feliz también porque mi papá y mi mamá me hicieron el caballo y quedó muy bonito”.
Con unos años más y con una experiencia y pasión por esta actividad está Miguel Ángel. Los preparativos, antes del certamen, es de tres meses para organizar la mejor actividad cultural que tienen los samarios.
“La logística es variada, buscamos que cada uno de los entes colabore con lo que puede ofrecer para organizar la música, las presentaciones, el recorrido de la cabalgata y la atención a cada una de las delegaciones, por ejemplo”, me explicó Miguel Ángel.
Salomé Orozco en una cabalgata de caballitos de madera.
De madera
El primer recuerdo que tengo de la Cabalgata es que cuando tenía tres años asistí al desfile de caballos de madera. Hicieron un concurso del mejor caballo de madera y el que mejor lo cabalgara, el mejor ganaba una ancheta con dulces. Quedé de primera, me sentía súper emocionada, es mi mejor recuerdo de la cabalgata.
Las fiestas normalmente duran cuatro días. La gente si no tiene caballo lo alquila. Mi última participación en la cabalgata fue en el 2019 (las del 2020 y 2021 fueron aplazadas ante la pandemia por la covid-19).
En esa ocasión monté caballo desde muy temprano, fui a la fiesta joven y participé en los juegos deportivos. Ese fue otro día feliz para mí, mi familia y mis paisanos, como siempre con nuestra tradicional Cabalgata del 20 de julio.
De la autora
Salomé Orozco
Lugar de nacimiento: Manizales
Edad: 12 años
Institución: Crisanto Luque
Grado: Séptimo
*Esta historia es producto de un semillero de periodismo cultural escolar de LA PATRIA y el Centro Cultural Banco de la República sede Manizales.
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