Las subidas y bajadas con la nueva ruta de camioneros

JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES

"Es una cosa caótica. Mire esta cantidad de pare y siga. Nosotros estamos acostumbrados a viajar por Irra, y por acá son tres horas más de camino, más peajes, más gastos. Eso está muy complicado", reclamó el camionero Juan Carlos Vélez el pasado sábado, quien viajaba desde Manizales hasta Medellín con un contenedor de alimentos congelados por la vía Cerritos - La Virginia - Anserma - Riosucio - Supía - La Felisa.
La nueva ruta se definió para los camiones y tractomulas de más de 16 toneladas, debido al cierre del puente de Irra, que hoy completa siete días, ante los problemas estructurales que presenta.
El recorrido de Juan Carlos era seguido por cerca de 30 camiones que hacia el mediodía se contaban en la vía Cerritos - la Virginia y que venían desde la capital de Caldas, desde Pereira o desde Buenaventura, hasta Medellín.  
Sin embargo, la tristeza y el malestar de varios camioneros era la felicidad de muchos vendedores ambulantes, en la vía Cerritos - La Virginia. "Hay mucho tráfico, yo vendo más que todo fruta y en un día bueno hago hasta $300 mil y me puedo ir temprano para la casita. Espero que hoy sea un día de esos", sostenía Jhoana Rodríguez, mientras terminaba de arreglar su canasta con mangostinos y de preparar las degustaciones que les da a los viajeros.
Más adelante, cerca del puente Francisco Jaramillo Ochoa, en la vía a La Virginia (Valle del Cauca), Dagoberto Molina, paletero del sector, señalaba la cantidad de tráfico que había, mientras se resguardaba en la sombra de su carpa por el intenso calor de 28 grados centígrados que se tenía a las 12:13 del mediodía. "Mire la congestión que hay. Yo diría que es un promedio de tres a cuatro camiones por cada carro particular que pasa", calculó.

Por la vía
Hacia la vía a Viterbo la sensación era igual. En el parador La Negra, al frente del municipio de Viterbo, la reflexión de Dignora Mejía, vendedora del lugar, es que hay que aprovechar el cuarto de hora que se tiene con el cierre del Puente de Irra, teniendo en cuenta que, según Pacífico III, el cálculo inicial de la restricción será de unos seis meses.
Su queja se centra en la cantidad de pare y siga que hay en el sector, cuatro en total, y cada uno de entre 15 y 25 minutos. "Eso hace que las ventas se mermen, porque los camioneros prefieren seguir derecho".
El negocio vecino, Salpicón, tenía otro cálculo. Según Mildred Eliana Yepes se aumentaron las ventas en un 20%, aunque coincide con su vecina sobre el impacto de los pare y siga y de las obras del sector. "Tenemos buen salpicón, helados, jugos y dulces, y esperamos que todo eso se venda", decía con una sonrisa.
A unos 30 minutos de ese sector, en el sector de San Lázaro (Anserma), Luis Alberto Jaime, propietario del centro recreacional Comapez, aplaudía las buenas ventas. "Se han incrementado entre un 60% y 70%. Muchos camioneros paran aquí porque ven un espacio cómodo para parquear, tenemos una buena trucha que cultivamos aquí mismo, y por el caldo de pescado que todos reclaman", mencionó.
Según sus cuentas, esa dinámica le permitirá generar cuatro empleos más los seis que tiene y aumentar la atención hasta 9:30 de la noche. "Hay que aprovechar ese cierre y prepararnos con un buen menú, atención y buenos precios".
Algunos camioneros que llegan de Buenaventura dicen que no tienen problemas con esta vía, ya que según sus cuentas se ahorran unos $120 mil de peajes y en general la vía es buena. "Claro que por Irra es mejor, es más amplia, más plana y hay buen servicio de grúas, por acá hay pasos muy estrechos, pero tocó hasta medallo city", señala Gustavo Mesa.  
Sin embargo, el reclamo del conductor Edwin Giraldo, quien también venía de Buenaventura, es que los siguen desviando. El sábado al mediodía recibieron un comunicado de Pacífico III que anunciaba las restricción de camiones por el puente Francisco Jaramillo Ochoa, en la ruta Asia - La Virginia, ante el incremento del flujo vehicular.   

Anserma y El Palo
40 minutos después, en la vía Anserma y San Clemente, corregimiento de Guática (Risaralda), Hernán Restrepo, representante del restaurante La Casona, seguía haciendo almuerzos, sin ocultar su felicidad. "Las ventas se triplicaron, y nos tocó mover el horario que era de 7:00 a.m a 7:00 p.m. hasta las 11:00 p.m. Ojalá sigan pasando por acá", insistía.
En el paso por Riosucio y Supía (Caldas), la gente igual celebró. Para negocios como el café San Siro, en Riosucio, hasta el incremento en el consumo de café se sintió.
La sensación no era la misma en el sector de El Palo. Las vendedoras de panela, arequipes, piononos y panderos, entre otros alimentos, se corrieron unos 200 metros de su habitual sitio, en la vía que de Irra conduce a Medellín, para la vía que viene de Supía rumbo a la capital de Antioquia, por la Troncal de Occidente, en busca de unas mejores ventas.  
Dora Hernández, estudiante de la Licenciatura en Pedagogía Infantil, y quien lleva 17 años con este negocio, asegura que sus ventas cayeron, porque los camiones no encuentran dónde parar o porque ya comieron en otros sitios. "Con tanta congestión, prefieren seguir derecho y ni nos miran. Antes vendía unos $200 mil diario, hoy no llevo $30 mil", dice mientras con voz cansada y una dulce sonrisa plantea: "Más bien ustedes, ¿por qué no me hacen el gasto?".

Dicen los camioneros
¿Cómo le parece esta vía por Anserma?
Edilberto Jiménez
Está muy complicada esta vía para tanta carramenta. Siempre viajo por acá porque es sola, pero ahora es grave.

Edwim Giraldo
Cualquier accidente genera el bloqueo más tremendo. Si cierran Irra seis meses, imagínese cómo se pondrá esta vía.

Gustavo Mesa
Son como unos 40 minutos más, pero además del tiempo el problema es la vía tan estrecha.