Santiago Buitrago. 

Foto | Tomada @ParisNice | LA PATRIA Santiago Buitrago. 

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El colombiano Santiago Buitrago (Bahrain Victorious) se mostró feliz tras levantar los brazos este miércoles en el Mont Brouilly, en la París Niza, una victoria que no esperaba.

"Realmente no esperaba ganar la etapa, pero sabía que estaba en buenas condiciones. Cuando vi que Roglic intentaba hacer la carrera más dura no sabía cómo iba a salir, así que ataqué desde lejos. Ganar una carrera del World Tour aquí en Francia es excepcional para mí", dijo un exultante Santiago Buitrago.

A sus 24 años, ganador de dos etapas en el Giro de Italia, Buitrago culminó el triunfo con el segundo puesto de la general.

"Tienes que intentarlo y eso es lo que hice. Tenía buenas piernas y un buen compañero de fuga con Plapp, que me ayudó a llegar al final. También estoy bien situado en la general, así que es genial. El objetivo era ayudar a Pello Bilbao o intentar yo subir al podio, así que es genial para el equipo. Es un día increíble para el Bahrein. Hicimos un muy buen trabajo", concluyó.

Solo se movió Evenepoel, y al final

Los favoritos reaccionaron tarde por detrás, sin ambición por la etapa, pero resueltos a abrir alguna diferencia. Remco Evenepoel fue el más ofensivo en la escalada y atacó a 500 metros para probar a los rivales. Pasó cuarto la línea, superado por el danés Mattias Skjelmose (Lidl), a 37 segundos de Buitrago.

El arreón de Remco lo notaron aspirantes al título. Bernal, Roglic y Jorgenson solo cedieron 2 segundos con el campeón belga, pero Pello Bilbao se dejó 13 y Carlos Rodríguez, el más perjudicado, 22.

En la general nuevo decorado, con Plapp al frente con 13 segundos sobre Buitrago y 27 respecto al exlíder Brandon McNulty. Almeida quedó a 29 y Evenepoel como líder real a 30. Ahora sobre Remco, Bernal se aleja a 10 segundos, Rodríguez a 32 y Roglic a 40.

La cuarta etapa, disputada entre Chalon-sur-Saône y Mont Brouilly, de 183 km, ofrecía montaña sin respiro con 7 puertos y 3.400 metros de desnivel acumulado. Ninguna broma en el primer examen en alto.

Día de calvario para los esprinters, quienes de inmediato se quedaron a cola de pelotón tras una salida rápida, donde se cubrieron 46 en la primera hora, antesala de una sucesión de puertos que no amedrentaron a los valientes habituales. Esta vez saltaron en fuga De Buyst (Lotto Dstny), Bisseger, Scaroni y Burgaudeau.

Una aventura que se fue disolviendo bajo la lluvia a medida que los puertos iban minando las fuerzas de los corredores. Scaroni fue el más rebelde, rodando en solitario como último superviviente hasta que el Bora de Roglic decidió poner ritmo de caza.

Pasó Scaroni cruzó la meta por primera vez en la cima del Mont Brouilly, a 38 km de la llegada definitiva y con 20 segundos de ventaja sobre un pelotón ya reducido. Ya no estaban en liza Gorka Izagirre (Cofidis) ni Marc Soler (UAE), ambos retirados. En el descenso se formó un grupo selecto perseguidor que terminó de absorber al fugitivo.

La principal dificultad de la etapa era el Col du Fût d'Avenas - Les Chappes (1a, 5,2 km al 7,2), pero antes, en el esprint bonificado de Régnié-Durette salieron a escena los grandes favoritos. Evenepoel le ganó por velocidad a Roglic, y de paso 6 segundos de premio, por 4 el esloveno.

Fueron los hombres del líder McNulty los encargados de poner ritmo camino del puerto de primera. Politt llevaba asfixiado al personal, pero alguien se sublevó en el ascenso, el australiano Luke Plapp, triple campeón nacional en ruta y doble en crono.

Buitrago muestra sus poderes para ganar en solitario

El ciclista "aussie" abrió hueco, pero reaccionó a tiempo saliendo del grupo perseguidor el bogotano Santiago Buitrago, con quien hizo la unión y la fuerza contra  la presión del Ineos de Rodríguez y el Soudal de Evenepoel.

Restaba la decisiva subida al Mont Brouilly (2a, 3 km à 7,6%). Una renta de 30 segundos para gestionar ante la presumible explosión del sector de la alta jerarquía. Pero nadie se animó a atacar de lejos, lo que sí hizo Buitrago a 1,3 de meta. Plapp se había dejado muchas fuerzas en la fuga, y no pudo responder a la arrancada del rival.

Buitrago apretó los dientes y voló hacia la cima, sin titubear, sin mirar atrás. Logró con honores la quinta victoria para su palmarés, un corredor que tiene 2 triunfos de etapa en el Giro, y sin duda, uno de los mejores escaladores del pelotón. Fiesta colombiana en la Carrera del Sol.

La quinta etapa será una cita con la media montaña que incluye cuatro ascensos de tercera categoría concentrados en la mitad del recorrido. Jornada entre Saint-Sauveur-de-Montagut y Sisteron de 193,5 kilómetros. 

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