"Oigo a Blades para leerlo y leo a Gabo para bailármelo"

Realidad y ficción: cada una cuenta su parte

Encuentro de narradores. Conversaciones sobre la música en la obra de Gabriel García Márquez. 

Alberto Salcedo Ramos le huye a las discusiones "maniqueas" de si la realidad tiene más seguidores que la ficción y otras cosas parecidas. Él participará en el Premio de Periodismo Gabriel García Márquez, que se realizará desde mañana hasta el jueves en Medellín. El cronista cree que los seres humanos inventamos las novelas para poder resistir los reportajes.
Sobre su asistencia al Premio, Salcedo Ramos dice: "Participaré en una mesa donde se analizará cómo se manejan los derechos humanos al contar historias. La idea es explorar la relación entre nuestras crónicas y las víctimas. Reflexionaremos sobre cómo al contar historias les damos un tatequieto a quienes pretenden imponernos el silencio".
Salcedo Ramos y Rubén Blades participarán en el homenaje que se le rendirá a Gabo el jueves a las 6:00 p.m en Plaza Mayor. "También conversaré con Blades, quizá el más grande cronista de la música popular latinoamericana en los últimos tiempos. En la obra de Gabo hay música, en la de Blades hay narración. Oigo a Blades para leerlo y leo a Gabo para bailármelo", aseguró.

Gabriel García Márquez, Rubén Blades y Alberto Salcedo Ramos han contado, cada uno a su manera, la historia del Caribe y de América Latina. Rubén Blades desde la música, Salcedo Ramos desde el periodismo y Gabo, con el vaivén magistral entre la ficción y la realidad, han construido una gran crónica de lo popular, que ha sido pieza fundamental para entender lo que significa ser latinoamericano.
En el encuentro, Blades y Salcedo Ramos mostrarán el camino que recorrió Gabo para narrar un continente, para descubrir en cada detalle de la vida cotidiana la explicación a muchas de las realidades complejas que hoy  enfrentamos.

Palabras
- ¿De modo que ninguna de las dos tiene primacía?
Ambas vertientes de la literatura, la de ficción y la de no ficción, son necesarias. El periodismo cuenta una parte de la realidad que es muy importante, y luego los escritores de ficción se encargan de contar otras verdades más íntimas que seguramente no se podrían contar desde los periódicos.

- ¿Qué recomienda a los participantes en el taller de periodismo narrativo?
Ser reporteros siempre, es decir, ensuciarse los pies de polvo. Tener paciencia, no creer que los datos se consiguen de un solo golpe. Hay que volver a los lugares todas las veces que sean necesarias. Lo último es evitar la "literaturización", es decir, ese vicio de querer que se les note lo bien que escriben. El buen escritor suena natural, al leerlo jamás nos enteramos de cuánto trabajo le costó cada palabra.

- ¿Qué ha leído últimamente que le haya impactado?
Acabo de leer La banda que escribía torcido. Es la historia del nuevo periodismo en Estados Unidos. Cuenta la tras escena de muchos reportajes clásicos que todos conocemos, pero lo novedoso es que nos ofrece el punto de vista de los editores: cómo se planearon las historias, cómo fue el proceso de corrección con los autores, cuántas veces fue y volvió el manuscrito. Recomendable para muchos autores petulantes de lengua castellana, que creen que quien edita los textos es su enemigo. ¡Hay que ver cuántos autores ponen su egolatría por encima del respeto que les deben a los lectores!".