Quizás andas abatido o sin alientos, entonces medita serenamente esta sabia lección del místico carmelita San Juan de la Cruz:
“En todas nuestras necesidades, trabajos y dificultades, los medios más seguros son la oración y la meditación.
Siempre hay que tener la esperanza de que Dios proveerá por los medios que Él quiere.
Cuando se agotan los recursos solo nos queda levantar los ojos al Señor y creer que Él nos ayuda como más conviene.
Siempre es vano conturbarse pues nunca sirve para provecho alguno.
Y así, aunque todo se acabe y toda esperanza se derrumbe y las cosas sucedan al revés, de nada sirve intranquilizarse.
Porque así todo, en lugar de arreglarse, se descompone y se daña”.
No es fácil persistir cuando estás desolado, pero con serenidad y confianza sales adelante. Cuida tu fe porque ella es tu fuente de energía.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015