La tercera parte de los alimentos producidos al año en el mundo para el consumo humano (1.300 millones de toneladas) se pierden o se desperdician. Se calcula que 870 millones de personas viven con hambre, es decir, que uno de cada ocho habitantes del mundo padecen esta situación y causa más muertes por año que enfermedades como la tuberculosis, malaria o VIH, así lo señala un reciente informe de la Organización de las naciones Unidas para la Agricultura y la alimentación (FAO).

De este informe sobresalen varios datos sobre este problema, que afecta a la naturaleza y a la seguridad alimentaria ,en un mundo en el que millones de personas carecen de una alimentación completa, equilibrada, suficiente e inocua. Su director dice que: "No podemos permitir que un tercio de todos los alimentos que producimos se pierda debido a prácticas inadecuadas. Las normas estéticas y de calidad llevan a los minoristas a rechazar grandes cantidades de alimentos perfectamente comestibles".

Está demostrado que el desperdicio se atribuye a dos grandes factores como el inadecuado almacenamiento y en otros por rechazo del consumidor, debido a la presentación (tamaño,color y aspecto).

Colombia contribuye con 2.4 millones de toneladas de comida entre frutas y verduras al año. Según la Asociación de bancos de Alimentos (Abaco), entidad que se encarga de distribuir a más de 1.410 fundaciones las donaciones otorgadas por las grandes cadenas, supermercado, también realizó un estudio que encontró que 1.154.000 toneladas de frutas y 261 mil toneladas de verduras se pierden, siendo las raíces y tubérculos los alimentos más desaprovechados.

La encuesta Nacional de situación nutricional dice que por falta de ingresos el 42% de los Colombianos se alimenta mal, consume dos de las tres comidas principales del día .

Los consumidores pueden asumir diversas pautas ecológicas para no perder o desperdiciarlas los alimentos, además de favorecer al bolsillo.

Medidas:

1- Realizar la lista de compra para no llevar exceso de productos, en especial los más perecederos: frutas y verduras.

2-Decisiones de compra estando en el mercado: productos de calidad, pero no basados en el aspecto, empaquetado y cantidad.

3-Organizar en la casa los alimentos de manera que se consuman todos. Planear los menús, no solo en cuanto a variedad y propiedades nutritivas sino también respecto a su estado de conservación.

4- Desechar los alimentos, sólo si están de verdad en malas condiciones y consumirlos antes de la fecha de vencimiento que indica la etiqueta.

5- Un producto almacenado en el congelador alarga su vida útil, pero hay que tener en cuenta su fecha de caducidad, anotar la fecha de congelación y no sobrepasar los 6 meses para ser consumido.