Nivel del río Magdalena continúa bajando en La Dorada

ADOLFO CORTES Y MANUEL ENRIQUE VALENCIA

LA PATRIA | LA DORADA

El nivel del río Magdalena continua bajando aunque en La Dorada, el personal de la Unidad de Gestión del Riesgo no baja la guardia.

El pasado viernes el río Magdalena llegó a un nivel de 6,6 metros, el último reporte de la Defensa Civil registra que está en 5,28 metros.

El gobernador encargado de Caldas, Ricardo Gómez, en compañía de Félix Ricardo Giraldo, director de la Unidad de Gestión del Riesgo, y el alcalde de La Dorada, Diego Pineda, visitaron los barrios más afectados y las obras de rehabilitación del sistema de alcantarillado fase dos del caño Lavapatas, las cuales se encuentran suspendidas por la creciente del río.

Barrios afectados

Para los habitantes de los barrios Corea, Bucamba, Conejo, Magdalena y La Concordia, la preocupación es grande al ver como el Magdalena se desbordaba en sitios que usualmente no inundaba.

Ayer, en el barrio Conejo se dio un desplazamiento de la banca debido a la socavación por incremento del río, la sedimentación no solo produjo el hundimiento de la orilla, sino que además provocó la caída de un árbol afectando dos vehículos que se encontraban estacionados.

Alexánder Gallego, director de la División de Gestión de Riesgo de La Dorada, manifestó que el río ha estado bajando y se encuentra en una cuota normal.

"En la noche del sábado se tuvo una emergencia en el barrio Conejo que fue atendida por bomberos y Defensa Civil. Debemos estar atentos a estos fenómenos y dar la alarma y las medidas correspondientes”, dijo.

Dos albergues

Foto | Adolfo Cortes| LA PATRIA

El coliseo Ventura Castillo sirvió de albergue para algunas familias afectadas por las lluvias.

En el barrio Delicias se encuentran actualmente 103 personas, mientras que en el Coliseo Ventura Castillo hay 35 entre niños y adultos. Al momento se reportan 310 familias afectadas por el invierno. Además de los barrios inundados, se tiene afectaciones en las veredas: La Bocana, Buena Vista, La Petrolea y Brisas.

La Fuerza Aérea hace constantes monitorios desde helicópteros, así mismo los cuerpos de socorro y la Policía Nacional.

Preocupados

Hugo Tovar

Las continuas crecientes del río Magdalena nos tiene aguantando hambre, no se puede pescar y si se arriesga no se coge ni para comer. Nos afecta también nuestras viviendas.

Merardo Martínez

Nos tiene muy afectados económicamente y a esto se suma que casi perdemos todas las canoas porque el río se llevó la banca donde teníamos los cambuches y se cayeron los árboles.