La agenda progresista
Señor Director:
Interesante que el discurso de posesión de Barack Obama para su segundo período haya sido calificado por analistas políticos como progresista. ¿En Colombia habrá interlocutores para esas propuestas?
La duda surge porque las tendencias políticas colombianas se están moviendo entre propuestas que pretenden acabar con lo que hay para implantar una sociedad nueva (izquierda tradicional) hasta las que pretenden refundar la patria y entregársele al mercado (capitalismo salvaje - uribismo purasangre), pasando por la subordinación de las políticas criollas a los vaivenes del mercado (santismo–neoliberalismo económicamente dependiente) y repitiendo con mucha frecuencia esa posición en la que coinciden gobernantes y opositores: actuar bajo la dependencia sicológica del buen vecino o de las verdades reveladas. Este síndrome se manifiesta en la compulsiva manía de seguir libretos considerados incuestionables: las teorías de Marx, las tesis de Mao o los designios de los Chicago boys.
En todos los casos se abandona el reto, y el riesgo, de construir alternativas colectivas concertadas para los problemas locales. Esta alternativa implica la posibilidad de equivocarse (¿y la otra no?), pero seguir verdades reveladas nos ha llevado a esta especie de estado inviable: no acompaña procesos radicales pero tampoco es un estado autónomo, ni es un estado asociado, generando una cultura política en la que se nos presenta como un éxito el encontrar ciudadanos con doble nacionalidad para que nos representen en el exterior, o se nos presenta como una ventaja el que nuestros candidatos presidenciales y funcionarios de alto rango hayan sido educados en universidades de otros países.
El resultado, en pocas palabras, es una falta de identidad y de rumbo que genera falta de empoderamiento ciudadano frente a la administración de lo público, lo que lleva a que unos pocos acepten sin discusión, o rechacen sin discusión, toda propuesta foránea que se considere más importante que lo que podríamos decidir entre nosotros.
A propuestas retadoras, como las que permiten calificar a Obama de progresista, debemos responder con agendas progresistas nuestras, construidas y concertadas entre nosotros. ¿Cuáles serán nuestras propuestas progresistas?
Julián Mejía B.
Super mediana
Señor Director:
Sorprende la encuesta publicada por el diario La República, que hicieron a 145 empresarios de Bogotá, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga, Cali, Pereira y Armenia, entre el 21 y el 24 de enero pasados. Según la ficha, no llamaron a ningún empresario de Manizales. La pregunta que les hicieron fue: ¿cuál es la empresa mediana que usted más admira?
Clasificaron tres empresas medianas de Manizales.
Lo raro es que entre las supuestas empresas medianas hay unas gigantescas como Alpina. Lo desconcertante es que no aparecen algunas empresas de larguísima trayectoria de Manizales.
http://www.larepublica.co/sites/default/files/larepublica/las%20empresas%20medianas%20mas%20admiradas.jpg
Como empresario, la que yo más admiro es Súper de Alimentos liderada por el mejor gerente que han parido estas montañas en toda su historia: Felipe Henao. En estos momentos están construyendo otra fábrica gigante en Maltería. Es una inversión enorme que debe ser reconocida y destacada.
Eduardo Botero
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