Repentistas que compiten en la actualidad en los Festivales Nacionales de la Trova.
GEOVANNY MARTÍNEZ
LA PATRIA | MANIZALES
La trova llegó a Caldas a mediados del siglo XIX con la colonización antioqueña. Entró por el norte, occidente y oriente del departamento. En Antioquia y Caldas es conocida como trova paisa, porque se canta con versos jocosos y es competitiva. Generalmente es cantada por dos personas, quienes deben enlazarse uno a otro en el tema al mismo tiempo que riman.
A pesar de ser una de las manifestaciones culturales más arraigadas en el departamento, hay poca investigación al respecto. Por eso Alejandra Duque, Leidy Johana Mejía González y David Rosero, estudiantes de la Universidad Nacional, se dieron a la tarea de hacer un estudio sobre la trova.
“Quisimos recopilar la historia de la improvisación oral en Caldas, ya que en nuestra región hay poca documentación sobre el tema y es importante otorgarle la visibilidad y el lugar que merece, al tratarse de una práctica muy utilizada en los eventos culturales y populares del país”, explicó Mejía González, quien además de estudiar ingeniería química es trovadora.
Indagando los investigadores encontraron que el romance, nombre con el que antiguamente se conocía esta práctica, viene desde la conquista española y en su incursión ha tenido múltiples modificaciones al ser adaptada a la cultura de cada región.
Los orígenes de la improvisación en Hispanoamérica, según los investigadores, hay que buscarlos más allá incluso de la colonización española y portuguesa. Guillermo Abadía Morales, folclorista colombiano, asegura que antes de que llegarán los españoles había copleros. "Lucas de Piedrahíta encontró en el barrio Teusaquillo de Bogotá, grupos indígenas que cantaban unas especies de endechas al compás de sus chirimías", explicó Abadía Morales.
Eso no prueba que lo que cantaban los indios fuese improvisado, pero sí que en la América prehispánica había también ciertos géneros de poesía oral análogos con los españoles.
A Colombia la trova llegó con la conquista española, soldados, marinos, orfebres, alarifes y campesinos trajeron consigo sus cantos y tonadas: villanelas, villancicos, cantares, coplas y romances con los que fueron creando, en su mezcla con los indígenas y negros, el patrimonio melódico y musical de la poesía oral improvisada en América.
Los estudiantes aseguran que los trovadores colombianos tienen una enorme deuda con los improvisadores españoles y citan algunas características comunes en ambos: uso de seudónimos buscando nombres sonoros y significativos, uso de una llamativa vestimenta, presencia de la mujer, carácter bohemio, espíritu de peregrinos, la controversia y disputa como forma de expresión predominante, el modo de cantar acompañados por instrumentos de cuerdas en una serie de diálogo músico-textual.
Destacan que la trova ha tenido cambios al ser adaptada en cada región. Entre los estilos más consolidados están la sencilla, que es la tradicional compuesta por cuatro versos, así como la dobleteada, que consta de ocho frases. También está la décima, que es un estribillo de 10 versos.
“Igualmente, hay otros ritmos con el sello de una comunidad particular, como la rajaleña del Huila; la piqueria costeña, que se escucha en los concursos vallenatos de improvisación; la trova llanera, caracterizada por ser muy rápida; el 5 y 6, que se construye con versos galopeados con la misma terminación (todas las frases deben finalizar en ando, ar, er o ir); y el pie forzado, cuyo último verso tiene que terminar en una frase determinada”, indicó Mejía González.
Además de ser una joya histórica de la cultura colombiana, la trova es un excelente ejercicio para la memoria y para enriquecer el léxico. Según ella hay trovadores de más de 80 años que no sufren de problemas de la memoria y tienen un amplio vocabulario.
La trova que en sus inicios era prácticamente del campo de arrieros y montañeros ha cambiado en cuánto a los usos y en cuanto a quienes la practican, pero no ha perdido su estructura. "Ahora hay trovadores que son ingenieros, licenciados, animadores, comediantes. También mezclan la trova con otros ritmos, por ejemplo el reguetón", comentó Mejía González y agregó que en Colombia hay personas que viven de trovar, pues dejó de ser un pasatiempo para convertirse en un oficio.
La evolución también se ha dado con la presencia femenina en los concursos. En la actualidad hay cuatro mujeres que trovan en el Eje Cafetero: Leidy Johana Mejía, Claudia Lucía Ríos, Lamparita; Jilari Romero, 'Cafetera', y Claudia Romero, Araucaria.
Para el trabajo titulado El repentismo en Caldas: los caminos de la trova, los investigadores integraron el saber de conocedores del tema en Caldas, como el historiador Luis Gustavo Arbeláez, docente del Colegio Rufino José Cuervo; Nelson Marín Franco, 'Cemento', organizador del Festival Nacional y Regional de la Trova en la Feria de Manizales y algunos exponentes de este género en la región como Hilder Patiño, ‘Tinto’; Cristian Mauricio Vélez, ‘Piquiña’; Julián Chacón, ‘Garrapata’, quien con 14 años es el trovador más joven del país y actual Rey Nacional Infantil de la Trova, título que logró el año pasado en la Feria de las Flores en Medellín.
Los investigadores aseguraron que esperan realizar un trabajo más amplio y grabar un documental, según ellos,
su propósito es rescatar una tradición que parece inadvertida para la academia, pero que hace parte fundamental de los valores culturales del país.
La evolución de la trova en versos
Versos de Salvo Ruiz considerado con Ñito Restrepo los pioneros de la trova en Antioquia y el Viejo Caldas. Las trovas fueron encontradas en 1955 tras la muerte de Ruiz:
Colgué mi tiple una vez
Pa' no volver a cantar
Pero me aburrí sin él
Y lo volví a descolgar
Quisiera ser alpargata
Para proteger tu pie
Y mirar de para arriba
Lo que la alpargata ve
Festival Nacional de la Trova en Medellín en 1979 tanda entre el 'Bobo' de Caldas y Hernán Darío Hincapié
Bobo de caldas:
El reinado de belleza
Ahí le aplico este detalle
Que las mujeres mas lindas
Son las mujeres del Valle.
Hernán Darío Hincapié:
Son las mujeres del Valle
Eso no te lo he entendido
Será este bobo de Caldas
Un antioqueño vendido
Festival Nacional de la Trova en Manizales en 2012 tanda entre Jhonatan Restrepo, 'Pelo e Lulo' y Mateo Jiménez, 'Dinamita':
'Pelo e Lulo':
Que mi gente en Manizales
Hoy le doy lo que me pida
Entregándoles el alma
Así me juego la vida
'Dinamita'
Mostrando le a Pelo e Lulo
Como es que es la movida
Y enseñándole a trovar
A si me juego la vida
--R2
Los trovadores más destacados en Caldas
Walter Emilio Ramírez, 'Fraile'
Gustavo Aristizábal, 'Sardino'
Nelson Marín Franco, 'Cemento'
Jorge Ferney Díaz, 'Serrucho'
Carlos Andrés Alarcón, 'El Mariscal'
Álvaro Marín, 'Razoda'
Faber Mejía González, 'Huevo'
Fotos | Cortesía Leidy Johana Mejía González | LA PATRIA
Investigadores y trovadores que intervinieron en el trabajo El repentismo en Caldas: los caminos de la trova.
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