El último vuelo de Paloma San Basilio

Hablar de Paloma San Basilio es traer de nuevo a la mente una de las épocas doradas de la música hispana. Tras 39 años de carrera musical, Paloma se retira de los escenarios no sin antes deleitarnos por última vez con su voz en vivo.

- ¿Se acuerda de la primera vez que vino a Colombia?
Claro, para la promoción de mi primer disco. Me enseñaron lugares cerca a Bogotá, los disfruté mucho. Fue cuando me enamoré de los vallenatos.

- Hablando de eso, ¿cómo fue su relación con el maestro Rafael Escalona?
Yo soy admiradora del vallenato y especialmente de los de él, entonces en algún momento coincidimos y existió la circunstancia para que me dedicara un vallenato (llamado ´Paloma San Basilio'). Cuando llamaron para decírmelo me pareció un detalle precioso e inesperado, porque creo que es uno de los grandes compositores colombianos de música popular. Cuando murió lo sentí mucho, teníamos una relación entrañable.

- ¿Quién es Paloma San Basilio?
Es un ser en tránsito, curioso, enamorado de la vida y que siempre intenta aprender para evolucionar.

- ¿Cree que volverá a nacer otra Paloma San Basilio?
Yo espero que nazcan muchas Palomas, el cielo es muy amplio y caben muchos pájaros en vuelo. Lo importante es que las personas que nazcan para esta profesión encuentren su camino y sean ellas mismas, sin necesidad de imitar o de buscar ser el reflejo de nadie.

- ¿Se arrepiente de algo que hizo o dejó de hacer en su vida?
Pienso que el arrepentimiento es un sentimiento que no aporta mucho. He tenido una carrera muy bonita, bastante coherente... Efectivamente, todo se puede mejorar, pero yo prefiero quedarme con la parte positiva de las cosas.

- ¿A qué le tiene miedo?
A muy pocas cosas. Quizá lo único que me produce miedo es el dolor de la gente que quiero, de resto no tengo grandes miedos, porque creo que es un mal compañero de viaje. Por eso trato de que no venga conmigo en ninguna maleta.

- De sus canciones ¿cuáles no pueden faltar su repertorio?
Obviamente no pueden faltar canciones como ‘No llores por mí Argentina', 'Luna de miel', 'Por qué me abandonaste', 'Beso a beso dulcemente'… Hay demasiadas canciones, con 30 y tanto de discos, hay muchos que están instalados en la memoria de la gente y entonces intento hacer en esta gira de despedida un recorrido un poco biográfico por todas las etapas de mi carrera. La idea es tratar de que haya una muestra de cada espacio musical desde que empecé hasta ahora.

- ¿Todavía le asusta subirse a un escenario?
Nada, en absoluto. Hace muchísimos años que perdí el miedo. Al poco tiempo de empezar ya estuve haciendo a Evita durante tres años en todos los teatros en Hispanoamérica y en España, y lógicamente con 11 funciones a la semana, o se te quita el miedo o te tienes que tomar una pastilla cada media hora. Gracias a mi experiencia como actriz, tengo emoción, me divierto en el escenario y lo disfruto, pero miedo no tengo nunca.

- ¿Le faltó algún país por visitar?
Pues sí hay muchos países que no he visitado pero no me gustan las respuestas en negativo, me gustan las respuestas en positivo porque en esta profesión he tenido momentos maravillosos y me he enamorado de un continente que se llama América. Cuando era una niña nunca soñé que iba a viajar tanto y es una de mis grandes pasiones. Por eso espero seguir conociendo más países en la etapa que me queda.

- Si fuera una heroína, ¿cuál superpoder le gustaría tener?
Tener el poder de quitar el dolor del mundo, la violencia de género, la violencia física, la violencia de pensamiento. Me gustaría quitar la violencia que anida en muchos corazones de las personas.

- ¿Cuál es su mayor debilidad?
Mi hija y mis nietos.

- ¿Cuándo fue la última vez que lloró?
Ayer, cuando volví de donde estaba mi familia. Hablé con mi hija por teléfono y me dijo que me acababa de ir, pero que ya me estaba echando mucho de menos y yo también los echo mucho de menos.

- ¿Cuál es el recuerdo más bonito que tiene como artista?
Yo creo que todo. Todo es un recorrido hermoso, rico, sorprendente, mucho más interesante de lo que me imaginaba y, la verdad, es que se ha pasado muy rápido. Hay miles, miles de momentos estupendos y eso es lo que me queda.

- ¿Qué lugar le da paz?
La paz va con uno mismo, hace parte de ti, si tienes paz y armonía en tu interior puedes estar en cualquier parte y sentir paz. Para mí, que soy una persona de naturaleza, lo que más paz me da es el mar.

- ¿Qué sonido le causa placer?
El de las olas.

- ¿Cuál es su mayor defecto?
Me canso enseguida de las cosas.

- ¿Cree en la reencarnación?
Yo ahora mismo no tengo claro qué es lo que va a pasar después. La teoría de la reencarnación tiene bastante sentido. Yo creo que el ciclo de la vida es un proceso de fusión, de evolución, de mezcla. Creo que todo es un fluido del que formamos parte, cada individuo forma parte del todo. Si reencarno, me gustaría en agua porque llega a todas partes entra por todos los rincones y limpia.

- ¿Cuándo dice mentiras?
Solo cuando no quiero hacerle daño a las personas.

- El lema de su vida…
Tolerancia e ilusión por vivir.

- Su frase favorita
Te quiero…

- ¿Por qué se retira de los escenarios?
Porque creo que son ciclos que uno debe ir cerrando para darle espacios a otros. Quiero darme el lujo de descubrir de qué cosas soy capaz, y más ahora que no haré giras ni discos. Eso me parece muy emocionante, es una forma de estar viva.

- ¿A qué se va a dedicar luego de la gira?
A viajar más con mis nietos y mi hija. También a pintar, acabo de hacer mis primeras exposiciones en España, a escribir en un blog de una publicación nacional… Quiero desarrollar esas actividades sin presión, sin prisa y sin tener ninguna meta, eso es lo que voy a hacer.