Tendencias que te definen

Estar a la moda no tiene nada de raro, incluso es un comportamiento cultural que pasa, retorna y construye tendencias alrededor de la música, ropa, dispositivos electrónicos, maneras de peinarse, de transformar el cuerpo, de hablar... El problema de las oleadas, sin embargo, son caer en extremos. Es decir, en los consumos desenfrenados que pueden llevar a los jóvenes a preocuparse demasiado por su cuerpo, a sentirse mal si no tienen las últimas prendas o zapatos, a probar sustancias psicoactivas para quedar bien en su grupo social, a vivir en un mundo virtual o a marcarse el cuerpo sin el debido argumento.
La antropóloga y especialista en consumos culturales Gloria Puerta advierte que la moda en adolescentes está atada a sus procesos de crecimiento: "Así tengan recursos restringidos se dejan llevar por el mercado, la publicidad y ofertas para escoger sus tendencias y estilos de acuerdo a afinidades, cercanía con amigos, familiares, intereses, gustos. Todo en un conjunto: música, ropa, cabello, entre otros".
Expertos consultados por LA PATRIA recomiendan algunas pautas al momento de tomar decisiones relacionadas con las tendencias.

En la música
El asesor de familia Germán Villegas recomienda tanto a los padres de familia como a los adolescentes tomarse el tiempo para escuchar los mensajes que trae consigo la música y las reacciones que producen en el organismo.
"No se trata de prohibir ciertos géneros ni de estigmatizar qué es bueno o malo. No se trata de lo que dice sino de lo que puede causarle al cuerpo. Si tú ves que un género altera violentamente tus sentidos, hay que frenarlo. Todo tiene su razón y está en cada uno buscar el origen de las acciones. Puede que el reguetón invite abiertamente al sexo, y que el rock dé mensajes subliminales, pero para criticar hay que conocer el origen de dicha música, los artistas y sus estilos".

En la red
La psicóloga Noelba Calle indica que los hábitos digitales de los muchachos son básicos: "Chatean y creen que así aprovechan las herramientas. Las instituciones educativas están fomentando el uso de las tecnologías, y luchan para que los estudiantes entiendan que hay un cómo, cuándo y dónde usarlas. Hay chicos que se vuelven adictos, que dejan de comer por estar en la internet, y vas y miras, y están en las redes sociales y además, chateando. Se desvían del verdadero concepto. Los padres deben vigilar los usos que hacen sus hijos en la internet, invitarlos a que conozcan más programas, plataformas y a que busquen actividades que complementen sus tareas".

El cabello
Para el estilista Jorge Cebra, los peinados son tendencias. "En jóvenes están muy de moda las crestas, los rapados a un solo lado, los diseños de animales, tribales, signos, escudos, doble patilla, figuraciones en pico y sobre cortes. Hay unas modas que pasan y otras que se quedan, y estos cortes están en furor desde hace rato".
El también estilista Germán Ospina asegura que moda es moda y como tal hay que estar preparado para ir a la vanguardia. "En este ambiente uno ve de todo. Lo más importante es que el pelo crece muy rápido, por lo que las modas pasajeras pueden revertirse. No hay que ser tan radicales en este asunto”.
Consumo de drogas
Para la psicóloga Noelba Calle el consumo de drogas es multicasual. "Pueden influir los problemas familiares, el tener una baja autoestima, el instinto de exploración del joven o la presión grupal de que pruebe algo. Lo que hay que enseñarles a los adolescentes es a que desarrollen las tres inteligencias: la emocional (capacidad de enfrentar problemas y resolverlos); social (capacidad de seleccionar amistades) y espiritual (conjunto de principios y valores). Aplicándolas diariamente pueden prevenir el consumo. El Plan Obligatorio de Salud determina que una persona que consume es enferma, así que se le deben mostrar al muchacho todos los riesgos que trae para su cuerpo y desarrollo mental".

Cambio de estilos
El psicólogo Eduardo Henao indica que en la adolescencia es normal que los muchachos cambien de estilos. "Hay cambios físicos y psicológicos; la cultura y la civilización tienen que ver en esos cambios. Si los padres ven que sus hijos se visten raro o actúan de manera extraña, lo mejor es que los interroguen, y no los repriman. Les pueden preguntar: ¿por qué te gusta?; ¿qué ganas con eso?; ¿qué te dicen en el colegio?; ¿te ha traído problemas?... es una herramienta de comunicación que funciona y que, a su vez, orienta y sugiere cosas a los chicos".

Obsesión por el físico
Según la psicóloga Olivia Sandoval, “un trastorno de la conducta alimentaria es una enfermedad provocada por la ansiedad y preocupación excesiva por el peso corporal y el aspecto físico. Esto ocurre cuando una persona ubica a la comida como eje central en su vida. Hay una distorsión de la autoimagen corporal”.
La especialista en trastornos alimentarios Lucila Robredo agrega: “se suele empezar a partir de la pubertad, 11, 12 años. Están vinculadas con la dificultad para aceptar la sexualidad y justamente ahí empieza el desarrollo sexual. La anorexia se dice que intenta copiar el cuerpo de las modelos, pero en realidad intenta copiar un cuerpo infantil, sin formas sexuales. Hay que trabajar con los jóvenes, hacerles seguimientos de alimentación, ver qué tanto se quieren e invitarlos a que no se autoexcluyan".
Los tatuajes
El tatuador manizaleño Smith González asegura que los tatuajes son un tema en constante crecimiento. "No es un asunto de moda, es de significados".
Para la psicóloga Noelba Calle los tatuajes son una forma de expresión de los jóvenes. "De entrada no se puede decir si son buenos o malos", sugiere. Advierte, sin embargo, que los padres deben estar pendientes de los cambios corporales de sus hijos: "pueden decorar su cuerpo para seguir una moda, identificarse con algún grupo social o para recordar momentos especiales. Lo que hay que saber es que esto podría llevar a los muchachos a hacerse otras marcas en el cuerpo como piercing, escarificación (incisiones), branding (quemaduras), implantes o mutilaciones. Hay que hablar con los hijos, y ellos deben tener confianza en sus padres".
El literal seis de la ley 711 de 2001, que reglamenta el ejercicio de la cosmetología en Colombia, deja claro que no se puede tratar a menores de edad sin la autorización escrita y autenticada de sus padres.

Tenga en cuenta
Los adolescentes son considerados por el Plan Obligatorio de Salud como una población de atención preferencial. De ahí que quienes consuman drogas o sufran de trastornos alimenticios puedan solicitar un servicio especializado a su EPS: esto se traduce en 60 psicoterapias gratuitas al año con psicólogos, siquiatras, nutricionistas y trabajadores sociales. También tienen derecho a 60 psicoterapias grupales, familiares o de pareja.

Afán de crecer
"¿Y por qué soñar con ser grande, cuando se es adolescente?", se preguntan una y otra vez los padres de familia. A lo que la psicóloga Noelba Calle cataloga como una pregunta y situación típica de la adolescencia.
"Es normal que quieran ser grandes, aunque en los jóvenes de hoy se marca más. Lo importante es que los padres de familia les hagan acompañamiento; los comprendan, les hablen mucho, que les enseñen a utilizar sus espacios para expresarse libremente, pero sanamente. Les expliquen los cambios de su cuerpo. Entender que si quieren jugar a ser grandes deben también asumir responsabilidades".
"La mayoría de las acciones de los niños y niñas que sean propias de los adultos tales como maquillarse, tener relaciones sexuales, consumir licor, entre otras, son motivadas por el deseo de sentirse importante y ser aceptado en un su círculo social", sostuvo el psicólogo Pablo Felipe Jaramillo.

Redacción: Isabel Vallejo Jiménez / Ilustración: Daniela Castro
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