Aunque el delito de extorsión bajó este año 30 por ciento según las cifras que maneja la Policía en Caldas, lo que tiene en alerta al grupo especializado contra el secuestro y la extorsión Gaula, es que se sigue realizando desde las cárceles a nombre de grupos armados ilegales.
Las investigaciones al respecto, según el comandante del grupo, capitán Javier Ramos, han dado este año la captura de 18 delincuentes, la mayoría de ellos recluidos en los centros penitenciarios de Barranquilla, Bogotá e Ibagué. En esta última funciona Picaleña, reclusorio desde donde operan bandas dedicadas a esta modalidad de extorsión.
El oficial informó que en la primera llamada de los delincuentes suplantan a la policía, a fin de obtener datos personales de las potenciales víctimas, como los nombres de los seres queridos, sitios de trabajo o estudio, así como ciertas rutinas familiares.
Pasados 15 o 20 días entra la segunda llamada, esta vez amenazan utilizando la información que ya tienen y con la exigencia de dinero, en montos que promedian dos millones y medio de pesos o tres millones de pesos. De esta manera atrapan a la víctima, sin salir de la cárcel.
El pago del dinero es una operación que se hace utilizando por lo regular cuentas bancarias de personas que viven en ciudades distintas a la de la víctima.
En este sentido el capitán Ramos advierte que aunque los dueños de las cuentas cuando son capturados argumentan desconocer la procedencia del dinero, tienen fundamentos para afirmar que el 95 por ciento de ellos sabe para qué se están prestando.
*165 Gaula
*123 Policía
* www.policia.gov.co
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