Su muerte pasó de ser una broma a una realidad

LA PATRIA | MANIZALES

"Salas, a usted lo mandaron a matar". Así le dijo un conocido a Veyergen Salas López en la madrugada del pasado domingo. La chanza molestó al caldense quien minutos después murió a manos del supuesto bromista, quien lo apuñaló en tres ocasiones en el pecho.

Según los testigos, Veyergen perdió mucha sangre, por ello cuando la Policía lo llevó en una Patrulla al hospital Santa Mónica, de Dosquebradas (Risaralda) llegó sin signos vitales.

En cuestión de minutos la noticia llegó hasta el barrio Las Ferias, de La Dorada. Allí reside la familia de la víctima y a primera hora del domingo, una sobrina y dos allegados de la víctima se acercaron a Medicina Legal de Pereira para identificarlo.

Mala suerte

En la noche del sábado, Veyergen estaba en compañía de una mujer ingiriendo licor en un establecimiento público del barrio San Fernando, de Dosquebradas. A las 12:30 de la madrugada del día siguiente se le acercó su agresor.

"La mujer que acompañaba a mi tío contó que él se enojó y le dijo que con eso no se bromeaba. Al rato él salió del lugar a fumarse un cigarrillo y ahí fue cuando el amigo lo empujó y lo apuñaló", manifestó la sobrina de la víctima.

La Dorada

Luego de varios años de residir en Dosquebradas, donde trabajaba en construcción, su familia trasladó el cuerpo hasta La Dorada para sepultarlo.

Tenía siete hermanos, no tuvo hijos y lo conocían como el Flaco. Murió a los 44 años.

Libre

La Policía detuvo al sospecho de apuñalar al constructor. Sin embargo, en la audiencia de garantías, el investigado quedó en libertad. El juez explicó que no hay pruebas que demuestren que él es el responsable del homicidio.