LA PATRIA | MANIZALES
15 años después de ocurridos varios casos de peculado en la empresa Aguas de Manizales, la Corte Suprema de Justicia resolvió el último recurso al que acudió el exgerente Jorge Alberto Vélez Jaramillo.
Los hechos a los que se refiere la sentencia sucedieron entre el 2002 y el 2003, cuando se hizo uso de recursos de la empresa sin justificación o con facturas falsas.
El alto Tribunal decidió, en casación, mantener la condena al exfuncionario como autor de peculado por apropiación de $13 millones 968 mil. La pena impuesta fue de 32 meses de prisión, con suspensión condicional. Es decir, libertad, pero con algunos compromisos.
De igual manera, señala la sentencia que la inhabilidad para el ejercicio de derechos y funciones públicas será igual al lapso de la sanción privativa de la libertad, “sin perjuicio de la vigencia de la inhabilidad intemporal prevista en el artículo 122 de la Constitución Política infligida en el fallo de primer grado”.
La parte final se refiere a la imposibilidad impuesta de por vida, según la Constitución, para ejercer cargos públicos por incurrir en una conducta entendida como acto de corrupción.
En el mismo fallo se revocó la condena en perjuicios, porque antes de la sentencia de segunda instancia se produjo el reintegro total de la suma apropiada.
La sentencia de la Corte favoreció parcialmente al entonces subgerente Jorge Eduardo Botero Zuluaga, porque ordenó cesar la acción penal por prescripción, es decir que ya se había pasado el tiempo de la justicia para investigar y condenar en relación con apropiaciones ilícitas de dinero en el 2002.
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