Policía y comerciante, en grave estado de salud

LA PATRIA | MANIZALES

Los hechos en los que un reconocido ganadero doradense y dos policías resultaron heridos son confusos. Las versiones de testigos y de las autoridades son diferentes. La balacera se registró el pasado jueves a las 4:00 de la tarde en la vía que comunica a La Dorada con Norcasia, en la vereda Doña Juana.

El patrullero César Gutiérrez, de 26 años, sufrió una lesión en el hombro derecho, que comprometió su pulmón. El patrullero Wilson Pérez, de 28 años, tiene una herida en la pierna izquierda. Los trasladaron a un hospital de Ibagué.

Al comerciante, de 54 años, lo hirieron de un disparo en la cabeza y permanece en el Hospital San Félix, de La Dorada. Según una persona allegada, ayer lo sometieron a una cirugía, pero permanecía estable.

No pararon

El coronel Necton Lincoln Borja Miranda, comandante de la Policía de Caldas, asegura que todo comenzó cuando dos hombres, que se movilizaban en una camioneta por la zona urbana, se negaron a detenerse cuando integrantes de la Sijín se lo pidieron.

Aceleraron, pero más adelante dos uniformados los vieron pasar a alta velocidad y los persiguieron hasta que intentaron desviarse hacia una finca. El conductor perdió el control del vehículo y chocó.

Según el comandante, los policías intentaron acercarse a los sospechosos, pero estos les respondieron a bala, por lo que reaccionaron e hirieron de un disparo en la cabeza al comerciante. Su acompañante intentó escapar, pero lo detuvieron.

"Lo que estamos verificando es porqué arremetieron contra los funcionarios y porqué uno de ellos pretendía huir", concluyó Borja Miranda.

Asustados

Según versiones de los ciudadanos, el comerciante sufrió un atentado sicarial hace dos años. "Los investigadores que los abordaron no portaban algo que los identificara y por eso huyeron, temiendo algún nuevo ataque", señaló un testigo.

Al parecer, intentaron esconderse en una finca, pero se chocaron y en medio de la confusión se generó el tiroteo.

Sobre este caso, Borja Miranda sostuvo que se tiene una versión oficial sobre los hechos y que analizan la de los ciudadanos, pero esto ya les corresponde a los investigadores.

En una fotografía que llegó a LA PATRIA se ve al comerciante herido, esposado y boca abajo. El coronel sostuvo que cuando los uniformados llegaron lo vieron con una pistola y fue necesario reducirlo y esposarlo, pero que luego se las quitaron para prestarle los primeros auxilios.