LA PATRIA | MANIZALES

"Nosotros nos dedicábamos a la extorsión. Es decir, al impuesto a las ollas de vicio. Cuando los jíbaros tenían problemas y uno vendía más que el otro, entonces el otro mandaba matar con nosotros, por cuenta de las líneas de vicio. También les dábamos beneficios a los jíbaros: pagaban una cuota mensual entre $600 mil y $800 mil a cambio de protección. Era obligatorio, si se negaban, los íbamos asesinando. Pero si cancelaban y necesitaban un favor, como matar a alguien, se los hacíamos, pero debían dar un pago extra".

Esta declaración se las entregó a las autoridades Jhon Fredy Serna Gallego, alias Pacho, otrora jefe de la banda Los Sandalios, que cometió, al menos, 35 homicidios en Chinchiná. Hoy está tras las rejas, ayudándoles a los investigadores a esclarecer esos crímenes. De paso, echando al agua a quienes laboraron para él.

Ñejo

Es el caso de Jéferson Rosero Caro, de 26 años, alias Ñejo, sentenciado esta semana por el Juzgado Penal del Circuito Especializado de Manizales a 17 años y seis meses de cárcel por el asesinato, el 22 de noviembre del 2010, de Nicolás Giraldo Giraldo, conocido en Chinchiná como el Chatarrero. Ocurrió en la carrera 7ª con calle 6ª.

Ñejo logró un preacuerdo con la Fiscalía, que fue avalado por el juez, luego de que alias Pacho lo señaló como integrante de Los Sandalios.

El condenado está detenido en la cárcel La 40, de Pereira. El día de los hechos abordó al Chatarrero y le pegó tres tiros. Según las declaraciones, lo asesinó por orden de Pacho, quien tomó esta decisión debido a que el occiso "dejaba entrar a la Policía a su chatarrería para desde allí vigilar a los que vendían vicio. Además, era informante".

En declaraciones se explicó que ese asesinato "lo ordenó el dueño de la olla el billar de Don José, manejado por alias Chepe". Pacho manifestó que no tuvo que darle arma de fuego a Ñejo, pues ya tenía una que le había regalado por otra vuelta. Era un revólver calibre 38.

"Me llamó y me confirmó que ya había matado al sapo. Chepe pagó $1 millón por esa vuelta", confirmó Pacho.

A Ñejo le aparece otra condena, a 42 años de prisión, ratificada por el Tribunal Superior de Manizales. La Corte Suprema inadmitió el recurso de casación. Lo sentenciaron por la muerte, el 4 de enero del 2011, de Rubén Darío Pimienta Castaño, alias Cachirulo, en el sector conocido como la bis del barrio Ventiaderos, de Chinchiná. Pacho pagó $200 mil por ese sicariato.

Pacho, el duro

La banda Los Sandalios era dirigida por Jhon Fredy Serna Gallego, alias Pacho, quien confesó su autoría en la muerte de, al menos, 35 personas en Chinchiná, como lo contó LA PATRIA el 24 de noviembre del 2014.

Gracias a un trabajo entre Gaula, Policía y Fiscalía, con la ayuda de Pacho se desempolvaron varios procesos sobre homicidios en Chinchiná y el departamento de Risaralda, para aclarar asesinatos ocurridos desde el 2001.

La banda estaba integrada por unas 20 personas. Los homicidios que se conocen, cometidos en Chinchiná, Marsella y Pereira, serían por peleas de territorios de la venta de estupefacientes, algunos encargados por jíbaros o personas de los municipios.

Alias Pacho fue recibido en interrogatorio entre el 5 y 6 de noviembre del 2013. Describió cómo fueron sus crímenes y por qué los cometió. A medida que le preguntaban por los alias de los asesinados, decía la fecha y hora del hecho y cómo ocurrió. Estas muertes fueron corroboradas por los investigadores.

Curioso

El 14 de diciembre del 2010, Ñejo le mandó a alias Pacho, a Jamundí (Valle), una encomienda. Dentro de un DVD encaletó el arma de fuego con la que se cometieron varios homicidios. Las autoridades se enteraron de que lo reclamaría un hombre de nombre Andrés. Esperaron que lo hiciera, lo abordaron y le incautaron el arma.